El peluquero de los futbolistas

Desde que en la década de los 70 irrumpiera la televisión en el deporte rey y éste se mediatizara, el trabajo de los futbolistas se desarrolla más allá de los terrenos de juego. Cuidar su imagen se ha convertido en algo primordial para los ases del balón. La mayoría son coquetos y exigentes con su 'look', porque hay muchas miradas puestas en ellos cada día y sus contratos publicitarios así lo requieren. Por estos motivos no se encomiendan a cualquiera a la hora de variar su estilo de ropa o corte de pelo y recurren a buenos profesionales. En la capital del Turia, a unos 300 metros del Estadio de Mestalla, en la calle Micer Mascó, se encuentra la peluquería de Juan Torres (Valencia, 1978), que lleva su nombre y por la que han pasado algunos de los futbolistas más importantes del Valencia Club de Fútbol en los últimos años.

El primer jugador blanquinegro que apostó por las tijeras de Juan Torres fue Roberto Fabián Ayala: Entró en la peluquería sobre el 2006, nos conoció por mediación de su mujer y la experiencia fue muy buena. La melena de oro del guardameta alemán Timo Hildebrand y el pelo rizado del zaguero italiano Emiliano Moretti fueron los siguientes en pasar por el salón. En la actualidad, los más asiduos son el brasileño Diego Alves y su compatriota Jonas, aunque también se han encomendado a él los recién llegados Eduardo Vargas y Vinicius Araujo. El último en llegar ha sido el levantinista Roger Martí.

Los futbolistas son bastante normales, no tienen problema en esperar su turno, se integran en el funcionamiento del salón y se dejan aconsejar, cuenta Torres. Y es que cortarle el pelo a jugadores no era una experiencia nueva para él, puesto que ya había atendido antes a varios en otro centro en el que estuvo trabajando: Le corté el pelo a jugadores del Levante como Rivera, Jofre y Cuéllar, entre otros. Roger Martí ha sido el primer granota de la plantilla actual en acudir a su centro de belleza: "Se ha arriesgado y eso me gusta, los laterales se los hemos cortado al cero y le hemos dejado unos 10 centímetros de pelo peinado hacia arriba".

El presidente de los azulgrana, Quico Catalán, es un asiduo. Él siempre lo ha tenido muy claro desde la primera vez que vino, quería un corte clásico, peinado hacia atrás y con un poco de volumen. Luego ya decidió cambiar y se dejó asesorar. Eliminamos la gomina, se lo cortamos más corto y lo moldeamos, más despeinado y con cera. El cambio de look del presidente fue bastante llamativo e incluso llegó a ser noticia.

Alves y su cresta de la suerte

El portero Diego Alves es, sin duda, el más atrevido de los clientes relacionados con el mundo del balompié que Juan atiende en su peluquería. El portero ha probado de todo, incluso unas mechas rubias que recordaban al ex arquero Santiago Cañizares. Le gustaba el pelo más largo y despeinado, trabajamos las mechas y después probamos el estilo cresta, dice el peluquero. Ese corte iba a convertirse en talismán para el carioca. Se lo hizo el pasado mes de febrero, justo antes del partido de liga contra el Sevilla en el Sánchez Pizjuán en el que el Valencia empató a cero con un hombre menos gracias a la actuación de su portero. Alves le paró con los pies un penalti a Rakitic y evitó la derrota valencianista con grandes intervenciones. Tres semanas más tarde volvió a la peluquería para mantener su peinado: Le fue muy bien y lo hemos mantenido hasta el día de hoy, aunque poco a poco es algo más exagerado. Le da buena suerte.

Diego es muy sencillo, nada soberbio, atiende a todo el mundo, sale a saludar a la gente y su imagen no corresponde para nada con la que se puede tener a través de los medios de comunicación, comenta el estilista. En cuanto a Jonas, destaca que es más reservado y siempre acude con las ideas claras sobre el peinado que quiere que le hagamos, como el chileno Eduardo Vargas, al que define como el más agresivo a la hora de peinarse. Vinicius, por su parte, cuenta con el hándicap del idioma. El gran desconocido por la afición che es bastante callado debido al idioma y pide el estilo del corte mediante fotografías.

De todo menos fútbol

Durante las sesiones con los futbolistas se habla de todo menos de fútbol: El rato que pasamos juntos es ameno, hablamos de todo menos de su trabajo. Con Diego, por ejemplo, solemos hablar de restaurantes, porque comer es algo que nos gusta a los dos. Con los demás charlamos de temas de actualidad, pero nunca de lo que pasa en el césped.

La próxima temporada es muy complicado que Juan Torres cumpla su sueño de atender a David Villa, ya que pone rumbo a Nueva York, aunque el próximo dueño del club podría traer a Mestalla algunas estrellas del planeta fútbol y puede que alguna decida cuidar su aspecto en su centro de estética, alargando así la lista de jugadores del peluquero valenciano.