Un amistoso de la Selección Valenciana para la lucha contra el coronavirus

'Fútbol en casa' unió ayer en una videollamada a Vicente Iborra, Toni Lato y Pablo Fornals. La Federación Valenciana de Fútbol ha impulsado una iniciativa en la que los tres jugadores contaron cómo están viviendo el confinamiento. En esa conversación también se desveló que el organismo que dirige Salva Gomar pretende organizar un partido amistoso para recaudar dinero para la lucha contra el Covid-19.

Al futbolista de Moncada, le hace especial «ilusión» jugar ese encuentro. Aunque con condiciones: «No tuve nunca la suerte de jugar en ninguna de las categorías . Tiene que ser comparable a la selección nacional. Ojalá no sea dentro de demasiado tiempo, porque uno ya tiene una edad…». En su once ideal no faltarían su excompañero en el Levante Héctor Rodas y para asegurarse los goles contaría con el exvalencianista Paco Alcácer. Iborr, aprovecha el Estado de Alarma para disfrutar de su familia: «Entreno a primera hora y luego estoy con mis hijos para ayudarles, estoy intentando pasar todo el tiempo que podamos juntos ya que en otros periodos del año no podemos».

Lato, por su parte, se encuentra en Pamplona donde vive en un piso, sin embargo no tiene queja: «Osasuna se ha portado muy bien y contamos con bastante equipamiento. El de la Pobla de Vallbona tiene ganas de jugar con el equipo rojillo: «Estoy deseándolo después de la oportunidad que me ha dado» aunque no olvida sus orígenes: «El Valencia es el club de mi vida». En esos principios destacó el papel de su abuelo a quien le debe su pasión y su fútbol, más allá de cualquier entrenador.

En el confinamiento a medias que se vive en Reino Unido, al jugador del West Ham Fornals le está permitido salir a hacer ejercicio a la calle: «Salgo a correr por las mañana todo tapado, aunque he visto a gente con zapatos que dice que va a practicar alguna actividad física. Vamos un poco con retraso con respecto a lo que estáis viviendo allí«, dice el de Castellón. Lo que no puede hacer el internacional es ir a restaurantes… algo que está aprovechando para arrancarse en la cocina. Y como en todos los inicios, no siempre todo sale bien: «No tengo más remedio, o cocino o me muero de hambre. El otro día hice un caldo de fideos con pollo que estaba de lujo, pero luego también hice un puré que me dio angustia...«. Su asesora personal es su madre y cuando el resultado es delicioso, lo comparte: «Si me sale un plato bueno se lo mando a mi abuela».