Argentina también celebra en Valencia

Poco importaba que ya hubiera amanecido, que fuera lunes laborable o que el inicio del partido se hubiera retrasado más de un hora. Tampoco parecía rebajarles la ilusión el hecho de que fuera la 16ª Copa América que logran. La felicidad en los rostros argentinos no se podía ocultar.

El partido ya fue especial desde antes de su inicio. Una serie de altercados en los aledaños del Hard Rock Stadium de Miami retrasaron su inicio más de una hora, dejando la posibilidad abierta a un aplazamiento o a un encuentro a puerta cerrada. Finalmente, se disputó con normalidad.

No fue un encuentro fácil para los argentinos. En el minuto 66, Leo Messi tuvo que abandonar el terreno de juego tras sufrir una lesión aparentemente dura. Con el marcador todavía sin estrenar, Montiel salía también dolido seis minutos después. Tras 90 minutos, pese a las varias ocasiones que tuvo el conjunto albiceleste, el partido se fue a prórroga. Ya en la segunda parte del tiempo extra, Lautaro Martínez, máximo goleador del torneo, puso el 1-0 definitivo que le daría su 16ª Copa América a Argentina.

Pese a todos estos inconvenientes, que debían haber cansado a la afición albiceleste, se lanzaron a la calle para entonar su variado repertorio de cánticos, saltar y reunirse en la Plaza del Ayuntamiento. Acompañados de percusión e instrumentos de viento, entonaron desde las 6:30 de la mañana cánticos como el famoso «Muchachos» del Mundial de Qatar o el «Brasil, decime que se siente». Se acordaron también de otros muchos países, rivales en lo futbolístico: Colombia, Francia, Inglaterra, México o Brasil. Después de trasnochar y convertirse en el equipo más laureado en la historia de la Copa América, cualquier motivo es bueno para cantar, bailar y celebrar junto a los demás.