El Ayuntamiento reactiva la fórmula para proteger al Valencia de Lim

La delegación de Deportes del Ayuntamiento de Valencia ha elaborado un informe en el que concede tanto al Valencia CF como al Levante UD un plazo de quince días para que presenten las alegaciones y documentos que consideren «para que no genere indefensión» la declaración. El plazo contará a partir de que se supere el periodo estival –las peñas de ambos clubes también podrán presentar alegaciones–.

La propuesta de declarar BIC al Valencia CF partió de Libertad VCF, uno de los movimientos más beligerantes contra la gestión del actual máximo accionista, Peter Lim, que desde su llegada al club hace nueve años se ha caracterizado por una gestión económica y deportiva más que deficiente, ya que la entidad de Mestalla soporta una deuda astronómica, carga con un estadio inacabado y flirtea con el descenso a Segunda División, como en la última temporada, donde salvó la categoría en la última jornada en el Benito Villamarín.

Del acuerdo acordado el 23 de febrero por todos los grupos se dio traslado a la presidenta del Valencia, Layhoon Chan, al presidente del Levante, Quico Catalán, y a las agrupaciones de peñas de los clubes, además de a la asociación Libertad VCF.

Nadie se pronunció al respecto, aunque la guía que marca la Generalitat para la declaración de BIC recomienda que todas las partes muestren su apoyo para blindar la protección, en este caso, de los dos clubes. Ante el estancamiento de la propuesta y que el anterior equipo de gobierno no aceleró los plazos, el Ayuntamiento quiere cumplir con este objetivo cuanto antes. «En febrero llevaron la declaración a pleno y tras la exposición pública no se ha hecho nada más. Se han perdido muchos meses. Compromís y PSPV durmieron un asunto que vamos a acelerar porque hay que cumplir con los compromisos que se aprobaron en el pleno», señala la concejal Rocío Gil.

La declaración del Valencia Club de Fútbol como Bien de Interés Cultural (BIC) es una fórmula más para que el máximo accionista, Peter Lim, no pueda disponer del Valencia a su antojo y una razón más que salga de la entidad, a la que ha sumido en una profunda crisis económica y deportiva de incierto futuro.

Desde Libertad VCF se buceó en la búsqueda de medidas para salvaguardar un club con 105 años de historia, y la fórmula BIC pretender poner en valor el arraigo de una entidad centenaria en la sociedad valenciana a todos los niveles, desde el meramente deportivo al económico, cultural y social. Tanto el Valencia como el Levante trascienden más allá del fútbol en el cap i casal. Convertir a las dos entidades en BIC las blinda. Hay quien considera que esta catalogación permitiría expropiar las acciones al máximo accionista en el caso de que no preservara la identidad del Valencia.

Los impulsores de la iniciativa, que cuenta con el voto favorable de todos los grupos municipales de la anterior Corporación municipal –Ciudadanos ya no está en la presente legislatura–, se basan en la acción llevada a cabo por la Junta de Andalucía para declarar BIC al Recreativo de Huelva, decano del fútbol español, y que dio cobertura a la expropiación de las acciones que había llevado meses antes el Ayuntamiento de la capital onubense. Los anteriores propietarios del club andaluz, Gildoy España, habían sumido a la institución en una profunda crisis económica con un rosario de impagos y deudas.