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«Año nuevo, vida nueva» es un dicho que suele utilizarse a menudo con el cierre de una etapa y el comienzo de otra. El paso, en este caso del 2023 al 2024, podría decirse que ha servido para proclamar un nuevo campeón del campeonato doméstico de fútbol. El Real Madrid vuelve a situarse en lo más alto de LaLiga, tras imponerse al Cádiz con la unidad B, y deja con la miel en los labios al FC Barcelona, el vigente ganador, que cedió su trono al caer estrepitosamente frente al Girona.
El equipo de Ancelotti se ha mostrado intratable a lo largo de estas 34 jornadas disputadas, logrando 27 victorias y cediendo una sola derrota, curiosamente contra uno de sus máximos rivales, el Atlético de Madrid, el mismo rival y en el mismo estadio contra el que cayeron eliminados en la Copa del Rey. En la Champions League es otro cantar. El equipo blanco se siente como pez en el agua y esta semana disputará la vuelta de las semifinales de la competición europea en lo que podría suponer el doblete en esta temporada y un nuevo título a sumar a las vitrinas, pero esa es otra historia.
En este sentido, está previsto que LaLiga dirigida por Javier Tebas reparte alrededor de 1.500 millones de euros por derechos televisivos en la temporada actual 2023-2024. De esa cantidad, 750 millones de euros, es decir el 50%, se reparte equitativamente entre todos los equipos de la competición. Mientras que el restante se da en función de la posición final en el torneo de la regularidad.
De este modo, el campeón se queda un 17% del pellizco, una cifra que se reduce gradualmente hasta el 0,25% que se adjudica el último clasificado de la competición, una posición a final de la campaña que puede significar una diferencia de varios millones de euros.
Así lo establece el Real Decreto sobre la venta centralizada de los derechos audiovisuales: «En la Primera División se tomarán en consideración los resultados deportivos de las cinco últimas temporadas, ponderándose los obtenidos en la última un 35 por 100, en la penúltima un 20 por 100 y un 15 por 100 cada una de la tres anteriores».
Es decir, todos los clubes ingresan una cantidad fija de 37,5 millones de euros. Pero como el campeón se lleva un 17% del total de los derechos audiovisuales, esto supone unos 127 millones de euros. De esta forma, el Real Madrid se va a embolsar algo más de 164 millones de euros como campeón de LaLiga.
A todo eso habría que sumarle al conjunto merengue los beneficios obtenidos por su rendimiento en competiciones europeas, más concretamente en Champions, donde podría alzarse de nuevo con la corona del continente y embolsarse otros tantos millones por victoria, ronda superada, etc.
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