Jesús Fortea, un joven futbolista de Albal que sigue cumpliendo el sueño de jugar en el Real Madrid

El pasado 28 de diciembre, Jesús Fortea volvió al campo de fútbol donde comenzó su ascendente carrera deportiva como futbolista. Excepcionalmente, el municipal Pepe Paredes abrió sus puertas, por Navidad, para recibir en el tapiz verde y con todos los honores, al joven que volvía a su pueblo natal para pasar unos días con la familia. Lleva casi cuatro temporadas en la capital de España por su dedicación al fútbol profesional. Con solo 15 años, su trayectoria está siendo brutal, el pasado 7 de junio firmó con La Fábrica del Real Madrid, tras haber pasado tres temporadas en la cantera del eterno rival, el Atlético de Madrid. Jesús comenzó a dar las primeras patadas al balón, con cuatro años siendo querubín en la escuela municipal del Albal CF donde estuvo otras tres campañas. Aprovechando su paso por el municipio con motivo de las fiestas, el alcalde Ramón Marí y el concejal de deportes Tino Moreno, lo recibieron en el campo de fútbol donde un ojeador, siendo muy niño, le abrió las puertas para fichar por el Levante UD donde jugó cinco temporadas. Menudo historial del joven cuyo ídolo siempre ha sido otro ex madridista, Cristiano Ronaldo.

Compartimos un rato muy agradable con él, con su familia y su representante Francisco Vila, también natural de Albal. Las voces de su madre (Isabel), de su padre (Jesús) y de su hermana (Melania) también nos interesaban, aunque solo las miradas hablaban: sencillez, orgullo y emoción fueron los titulares de sus ojos. Los pelos de punta se nos pusieron al confirmar de sus bocas la satisfacción del sueño cumplido del canterano y por el que este pasado año han cambiado su residencia e incluso su forma de vida. Tras su fichaje por el Real Madrid se han asentado todos en el municipio de Valdebebas para estar más cerca de la prometedora estrella del fútbol, «que ha crecido con el balón en los pies», nos contó su padre quien le repite mucho un consejo «que tenga los pies en el suelo». Su madre ha dejado su trabajo para asentarse en Madrid, ella ha sido la que lo ha acompañado durante toda su carrera deportiva a los partidos y entrenamientos, «no nos gustaba el fútbol, pero ahora nos encanta verlo jugar».