El Huracán, otra vez a las puertas

Las puertas de Segunda siguen cerradas a cal y canto para el Huracán. El conjunto valenciano no encuentra la llave del ascenso a la categoría de plata y ya van tres intentos en sus cuatro años de historia. Caer ante un equipo con la trayectoria del Huesca que cuenta con jugadores como Fran Mérida y que desde el 6 de octubre de 2013 no ha perdido en su campo es comprensible. Pero eso no consuela a una plantilla que ayer se llevó un duro golpe psicológico.

El empate a un gol de la ida clasificaba al Huesca antes del pitido inicial. El Huracán no quería quedarse de nuevo a un peldaño de Segunda, y por ello Seligrat opostó por un once ofensivo con Tariq y Javi Navarro en el ataque. El primero llegó extramotivado ya que El Alcoraz había sido su casa durante cinco años. La afición, dividida por su regreso, sufrió de sus botas algunas de las pocas ocasiones del Huracán.

En los primeros compases del encuentro parecía que la pelota quemaba a los futbolistas al igual que el intenso sol. Ninguno de los dos equipos quería hacerse dueño del partido. Los centrocampistas estaban desaparecidos y el esférico vagaba de un lado al otro del terreno de juego sin dueño. Con el paso de los minutos, parecía que el Huesca se hacía con el control pero se topaba con un inconmesurable Paco.

El guardameta del Huracán asomaba la mano en el momento justo para tapar el hueco o sacaba los puños para enviar lejos de su portería un disparo de Tyronne. El equipo valenciano, por su parte, intentaba romper el empate a balón parado. Pero ni con esas. Luismi Loro, quien ha aprovechado a lo largo de la temporada las jugadas de estrategia, ayer no tenía su mejor día.

Tras el descanso, el Huracán salió con ganas. Amarilla se hizo grande en el centro de la zaga y cortó las peligrosas internadas del Huesca que con sólo 45 minutos por delante y virtualmente equipo de Segunda retrasó sus líneas. Corría el minuto 53 cuando Luismi Loro volvía a intentarlo, esta vez desde fuera del área aprovechando que no había ningún rival marcándole.

Pero el que anotó fue otro de los protagonistas de la eliminatoria, Tyronne, que esperó al esférico en el segundo palo y no perdonó. Sin apenas conceder al Huracán tiempo para reponerse, Mainz aprovechaba una contra y anotaba el segundo ante el delirio de la grada local y la desesperación de los de Seligrat. El técnico, expulsado en la ida, sufría en la grada mientras en el banquillo dirigía a los valencianos Miguel Ángel Ferrer Mista en un debú de lo más amargo.

Los dos tantos convirtieron en negativos los cerca de 40 grados que ayer se registraron en Huesca dejándolos fríos. Tras cinco minutos de bajón, el Huracán buscó el gol que los metiera en el partido, esta vez por parte del recién sustituido Aridai. Pero el cero del equipo visitante no se movió del electrónico.

Hoy, el conjunto de Torrent se marcha de vacaciones. La mayoría de sus futbolistas con su futuro en el aire pero con la certeza de que Huracán cuenta con una afición que no les falla. Ayer, alrededor de 300 hinchas estuvieron en El Alcoraz bajo el intenso calor que era todavía más duro tras el viaje en carretera hasta Huesca. Al final de la eliminatoria hubo algún momento de tensión. Toni Hernández, presidente rojiblanco, acusó a su homólogo en el club local de insultarle.