Una losa de 15 minutos que condena al Mestalla

Fue una losa demasiado pesada. El Mestalla no consigue arrancar y ayer le condenó su mal inicio de partido. Y es que el Ejea ya vencía por 2-0 en el minuto 15. El filial valencianista reaccionó, lo intentó por todos los medios y dispuso de ocasiones como un remate al larguero de Jordi Sánchez. Sin embargo, una vez más, le perjudicó su falta de acierto en los metros finales. El conjunto de Chema Sanz vuelve a la zona peligrosa de la tabla.

El arranque del encuentro no pudo ser peor para los valencianistas con dos goles en contra en apenas quince minutos obra de Manu Molina y David Mainz. Todos los planes elaborados durante la semana en Paterna y en los momentos previos en el vestuario ya no servían para nada. El Ejea entró en el campo con una tremenda verticalidad y, en dos acciones a la espalda de la defensa blanquinegra, dejó el partido encarrilado.

El Mestalla tuvo momentos de duda, pero supo reaccionar mediado el primer tiempo. Se acercó con peligro al área de Rafa Santos, en especial con un remate de chilena de Jordi Sánchez. Lástima que su acrobático disparo fuera centrado, porque de lo contrario habría sido el golazo de la jornada. El filial se fue adelante en busca de reducir diferencias, pero el Ejea, a la contra, a punto estuvo de dar algún disgusto más a los blanquinegros.

En la segunda mitad el Mestalla fue a por todas y Rafa Santos comenzó a ser el protagonista de su equipo respondiendo a remates de Carlos González y, sobre todo, a un obús de Koba Lein de falta directa. En el minuto 75 Jordi Sánchez cabeceó al larguero con el portero ya batido. Era un asedio del filial sin premio alguno. Sacó un sinfín de saques de esquina, de faltas, pero sin encontrar ese tanto que diera emoción a los últimos minutos.

El filial blanquinegro peleó hasta el pitido final, aunque no obtuvo recompensa. Nuevamente, su falta de efectividad le costó caro. El Mestalla necesita recuperar el gol para tomar impulso. Con la derrota frente al Ejea, el conjunto de Chema Sanz finaliza la jornada en decimosexta posición, volviendo a esa zona de peligro que había abandonado tras ganar al Badalona. Hasta ahora, su única victoria de la temporada.