Ivana Knöll, la modelo croata que desafía la censura en el Mundial de Qatar

Qatar tiene estrictas regulaciones sobre lo que los residentes y visitantes pueden vestir. Las mujeres lucen de negro de la cabeza a los pies, apenas con un hueco abierto para los ojos. Llevan puesto el niqab, la prenda que el wahabismo, la versión saudí del islam más rigorista, exige para la mujer.

Para la celebración de la Copa del Mundo, las autoridades han hecho una serie de recomendaciones sobre lo que los extranjeros deben llevar. Los turistas no están obligados a utilizar la ropa tradicional catarí, pero sí deben usar prendas conservadoras que se adapten al código de vestimenta del país. Las mujeres extranjeras deben optar por blusas sin escotes o playeras que cubran la parte superior de sus brazos. Por otro lado, las faldas, shorts o vestidos deberán ir por debajo de la rodilla, mientras que los leggings no están permitidos por ajustarse mucho al cuerpo. Los pantalones deben ser recatados y no rotos.

Ivana Knöll, modelo croata con más de 1,6 millones de seguidores en Instagram, ha viajado hasta Qatar para animar a Croacia en el Mundial y ha decidido no hacer caso de esas rigurosas normas de vestir. La modelo se pasea por las gradas de los estadios donde juega su selección con llamativas y coloridas vestimentas, en lo que supone un desafío televisado a las recomendaciones de las autoridades.

En su página de Instagram (knolldoll), con casi dos millones de seguidores, la modelo croata comparte vídeos y fotografías de su día a día en Qatar durante el Mundial.

La influencer está en el punto de mira de las autoridades de Qatar, que ven su forma de vestir como una ofensa a su país y su cultura, aunque no se han atrevido a censurar sus publicaciones o su presencia en los estadios ante el temor a la crítica internacional.

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