Xavi Torres encima a Oriol Romeu en un partido entre el Betis y el Valencia. efe/paco puentes

El valenciano Xavi Torres, condenado por el Supremo por amaño de partidos

El futbolista, castigado a 10 meses de cárcel y a 22 de inhabilitación por un fallo que rebaja la condena que impuso la Audiencia de Navarra

EP

Jueves, 19 de enero 2023, 22:15

El valenciano Xavi Torres ha sido condenado por el Tribunal Supremo por amaño de partidos. El Alto Tribunal ha rebajado las penas de prisión impuestas a los nueve condenados por el denominado 'caso Osasuna', en el que se consideró probado que miembros de la junta directiva de Osasuna acordaron primar al mediocentro de Xàbia y a Antonio Amaña, entonces futbolistas del Betis para «alterar los resultados de la competición deportiva». Ha impuesto penas de entre 10 meses y 5 años y 7 meses de cárcel.

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En una sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, los magistrados han estimado parcialmente el recurso de las defensas que pedían absolver a los condenados. El tribunal ha acordado mantener las penas por el delito de apropiación indebida agravada que impuso la Audiencia de Navarra, aunque reduce ligeramente las correspondientes al delito de falsedad –al establecer que los condenados por este delito sólo pueden ser sancionados por un delito y no por dos en concurso como apreció la Audiencia– y al de corrupción deportiva, así como las multas.

La decisión del Supremo tiene lugar después de que el pasado noviembre la Fiscalía pidiese al tribunal que mantuviese las penas al considerar probado que miembros de la junta directiva del club acordaron primar a dos jugadores del Betis para «alterar los resultados de la competición deportiva». En la vista pública, las defensas se pronunciaron en contra de la sentencia que dictó penas que oscilaron entre los 8 años y 8 meses de prisión y el año de cárcel por delitos de apropiación indebida, falsedad en documento mercantil, falsedad contable y corrupción deportiva. Las acusaciones ejercidas por Osasuna y LaLiga coincidieron con el criterio de la Fiscalía y pidieron mantener las condenas.

En lo que respecta a los exjugadores Xavi Torres –y también Antonio Amaya–, el Supremo les condena a 10 meses de prisión y al pago de una multa de 400.000 euros a cada uno por delito de corrupción deportiva. Por lo tanto, ven reducida la condena impuesta por la Audiencia de Navarra en dos meses.

En cuanto al delito de corrupción deportiva, relacionado con la situación que atravesaba el equipo en la tabla clasificatoria en la temporada 2013-2014 cuando estaba en grave riesgo de descender, el tribunal indica que el presidente, dos directivos y el gerente, se pusieron de acuerdo con dos futbolistas del Real Betis, con ascendencia en el vestuario, para pagarles 650.000 euros para que ganaran al Valladolid –que estaba luchando por la permanencia en la categoría como Osasuna– y perdieran contra el club navarro.

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El ponente indica que, en contra del criterio de la Audiencia de Navarra, las primas por ganar, sean encubiertas u ofrecidas por un tercero al club al que pertenezcan los jugadores, no pueden ser consideradas penalmente típicas. Razona que ese incentivo «no puede ser lícito cuando lo da el club al que pertenece el jugador, y delictivo cuando lo ofrece un tercero, sin perjuicio de la legislación deportiva al respecto».

«Un jugador puede, con su actuación, como una opción posible, perder un encuentro, pero no ganarlo. Y no puede ganarlo porque no depende exclusivamente de su voluntad, sino de otros factores. Y lo que no puede conseguirse voluntariamente, porque es imposible, tampoco puede ser sancionable penalmente», ahonda.

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Y añade que al contrario, «sí se encuentra en mano de sus protagonistas» el decidir «jugar mal intencionadamente y dejarse ganar». «Este delito es de tendencia, y valdría probarse el pacto de primar por perder, para que el delito se encuentre ya consumado», añade.

Xavi Torres milita actualmente en el Lugo, de Segunda, que al cierre de esta edición no se había pronunciado sobre la sentencia. El centrocampista fue uno de los investigados por el supuesto amaño del Levante-Zaragoza de 2011. El futbolista fue absuelto en esta causa en diciembre de 2019 de un delito de corrupción deportiva, ya que el juez no halló pruebas de amaño. La Fiscalía recurrió la sentencia ante la Audiencia Provincial de Valencia y esta instancia lo rechazó.

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