España vuelve a enredarse con sus fantasmas en los segundos finales

La selección española femenina de balonmano sumó su primer punto en la segunda fase del Europeo de Suecia, al empatar este lunes 20-20 con Alemania, en un encuentro en el que España volvió a verse atrapado por sus fantasmas en los segundos finales.

Quiso el destino que el conjunto español volviese a encontrarse, apenas 48 horas después de la cruel derrota encajada ante Francia, ante una situación similar a la que le costó el partido ante las galas.

Un dramático desenlace que pesó, y de que manera, sobre las cabezas de las jugadoras y el cuerpo técnico del equipo español, que con empate (20-20) en el marcador y en posesión del último balón, prefirió no arriesgar en busca de la victoria.

"Hoy no vamos a ganar, vamos a asegurar el empate", señaló el seleccionador español Jorge Dueñas, incapaz de olvidar el gol en el último segundo desde su propio campo de Allison Pineau que selló el sábado la derrota española (22-23) ante Francia.

Una jugada que España no estaba dispuesta a volver a repetir hoy, aunque a punto estuvo, tras el fallido pase de Carmen Martín a la pivote Ainhoa Hernández, en el que por fortuna las colegiadas señalaron falta a favor de las españolas.

Susto que el conjunto español no estaba dispuesto a repetir en un último lanzamiento lejano, que pareció buscar más que el reloj llegase a cero, que batir a la portera alemana Dinah Eckerle.

De hecho, las jugadoras españolas celebraron sobre la pista el empate casi como una victoria, un claro síntoma de las dolorosas secuelas que ha dejado en el seno del equipo español la derrota ante Francia.

Agobios finales que la selección española se hubiese evitado de mantener en la segunda parte, el buen nivel de juego exhibido en el primer tiempo y que permitió a las de Jorge Dueñas marcharse al descanso con una renta de tres tantos (12-9).

Una ventaja que las "guerreras" lograron ampliar todavía más en los primeros minutos de la reanudación con dos goles de penalti de Nerea Pena, que situaron al equipo español con una ventaja de cinco goles (14-9) en el marcador.

Pero como ya ocurrió ante Francia, en un encuentro en el que España desperdició una renta de cuatro goles al inicio del segundo tiempo, las "guerreras" se atascaron por completo en ataque en la segunda parte, lo que propició la remontada germana (19-20) a falta de menos de ocho minutos para la conclusión.

Un tiempo en que la guardameta Silvia Navarro, que cerró el choque con un 44 por ciento de paradas, sustentó con sus intervenciones las opciones de victoria del conjunto español, que por lo visto hoy, aún deberá esperar algún tiempo para superar los fantasmas creados por la derrota ante Francia.