Borrar
Urgente En directo | Los 133 cardenales electores se encierran en la Capilla Sixtina para votar a un nuevo Papa
Elena López, durante un ejercicio. lp
«Competir con el menisco roto y ganar un Mundial es algo único»
EN FEMENINO | ELENA LÓPEZ GIMNASTA

«Competir con el menisco roto y ganar un Mundial es algo único»

La medallista olímpica de Turís se retira a los 23 años y quiere estudiar fisioterapia para ayudar a las futuras gimnastas

LOURDES MARTÍ

Lunes, 24 de septiembre 2018, 00:45

El nombre de Elena López (Turís, 1994) siempre irá ligado a Sandra Aguilar, Artemi Gavezou, Lourdes Mohedano y Alejandra Quereda. El equipo de gimnasia rítmica logró en Río la primera plata olímpica para España desde Atlanta. Poco más de dos años después, la valenciana se despide del deporte profesional. En una trayectoria marcada por las lesiones, su intención ahora es ayudar a las futuras gimnastas.

-¿Cómo asume 'la retirada' una persona de 23 años?

-Con 16 años eres sénior, disputas mundiales, con 17 estuve en los Juegos de Londres. Va todo muy rápido, empiezas desde pequeña con mucha exigencia, los éxitos con trabajo llegan también pronto pero tiene la desventaja de que la carrera deportiva es muy corta. Yo estoy tranquila porque he puesto todo lo que estaba en mis manos y puedo estar contenta por todo lo que hemos conseguido tanto el resto del equipo como yo.

-Además de todo el sacrificio que supone el deporte de élite, de enfrentarse a las rivales, usted ha tenido quizás su mayor enemigo en las lesiones que han marcado su carrera.

-Por suerte o desgracia he pasado cuatro veces por quirófano, son gajes del oficio que me han ayudado a crecer. Es cierto que sí que se me ha hecho cuesta arriba porque me dolía el pie al andar, siete horas entrenamiento cada día y luego poder llegar a la cita más importante que era Río. He sido bastante fuerte en ese aspecto, creo que cada uno nos ponemos nuestras metas y obstáculos y al final son piedras que hay que pasar.

-Y usted ha aprovechado esa experiencia para echarle una mano a las futuras gimnastas.

-Me han hecho mil pruebas, resonancias... Me he dado cuenta de que en cualquier deporte profesional debemos tener un gran equipo técnico pero también médico y ambos deben trabajar en la misma dirección para lograr el objetivo marcado. Empecé a hacer el grado de técnico de rayos, me queda este año y el que viene quiero hacer fisioterapia y nutrición. Además estudio TAFAD (Ciclo formativo de Técnico Superior de Actividades Físicas y Deportivas).

-Siempre está vinculada al deporte.

-Es un mundo muy importante para mí y que me ha hecho muy feliz. Ahora sigo ligada a él pero desde otro punto de vista. Ahora estudio, doy charlas, conferencias, masterclass...

-Tengo entendido que ha ido a Chile.

-Sí, fui allí a hacer una masterclass de cinco días. Allí les hacemos ver que todo es posible, que empezamos como ellas, con ganas, ilusión y esfuerzo. Tienen muchas ganas de mejorar. Está claro que las condiciones de allí no son como las nuestras pero están cogiendo nivel y quedan en posiciones altas. Me alegro mucho porque en Latinoamérica siempre nos han tenido mucho aprecio, nos han reconocido siempre.

-Aquí quizás ese reconocimiento ha sido más tardío, ¿no? Les ha costado muchos años de esfuerzo.

-Creo que a partir del primer Mundial en 2013-2014 nos empezaron a dar más visibilidad, los dos años siguientes hicimos el anuncio del cava y claro, después llegó la medalla en Río.

-Este verano hizo dos años de aquella plata, ¿le da más valor en su segundo aniversario que en el primero?

-Es un momento que recordaremos siempre porque es lo máximo, subir al podio representando en su país, es indescriptible, son muchos años de sacrificio, horas de entrenamientos y lesiones que recuperar. Ahí no éramos conscientes de lo que habíamos logrado, ahora te das cuenta de todo y es muy gratificante.

-Supongo que ese es el título más importante. ¿Pero cuál es su instante más especial?

-Quizás me quedaría con la primera vez en 2013 que estaba lesionada y competir con el menisco roto y ser campeonas del mundo fue algo único. En 2016 arrastraba una lesión de 2015 y ese año y esa medalla en los Juegos después de todo lo malo que pasó también la recuerdo con mucho cariño.

-Habla de lesiones, procesos de recuperación, medallas... ¿Quién le ayudaba en esos momentos? ¿Nunca le entraron ganas de arrojar la toalla?

-En Madrid, donde vivo desde hace diez años, cuento con mi equipo y mi entrenadora. Ellas eran las que más me alentaban, son mi familia aquí. De la mía recuerdo todo lo que me apoyaban al principio cuando era pequeña y no podía ir a cumpleaños, que salías de clase y tenías que ir a entrenar. Me apunté a gimnasia porque sí, no sabía ni lo que era y cuando iba consiguiendo cosas y me llamaron con 13 años para irme a Madrid era consciente de que el tren pasaría una vez y pensé que para todo lo demás ya tendría tiempo.

-¿Se plantea regresar a Valencia, a su Turís natal donde se le reconoce e incluso tiene una calle?

-De momento me quedo en Madrid, he pasado la última década aquí y estoy matriculada aquí pero Valencia siempre será mi casa.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias «Competir con el menisco roto y ganar un Mundial es algo único»