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El Antares vive un dulce destierro a causa del Eurobasket femenino. La sala de la Fonteta que usa habitualmente para que sus chicas de gimnasia artística se entrenen no da las medidas necesarias: ni de superficie ni de altura. «Las niñas han ido creciendo y ahora hay ejercicios que no pueden hacer correctamente porque golpean las piernas con el techo», comenta una de las madres. Los progenitores y el propio club llevan tiempo reivindicando un espacio que ahora han hallado de repente, pero de forma temporal: el pabellón del antiguo colegio Santo Grial, que será demolido en septiembre dentro de la urbanización de la zona que rodea el futuro Casal España Arena. La actuación prevé el nuevo edificio para el centro educativo.
«Sería un espacio perfecto para nuestro club», reivindica Adrián Rodríguez, director del Antares: «Está complicado, pero vamos a reivindicar que no se derribe este espacio. De momento, debemos agradecer la ayuda del Valencia Basket, que nos ha cedido esta nave». También se ha desplazado a los alumnos del colegio, que realizan sus clases de educación física en la Fonteta. Y es que la gimnasia artística tiene la peculiaridad de que sus aparatos deben estar anclados. Además, tanto el suelo (12 metros por otros tantos) como la corredera tienen unas dimensiones muy concretas. «No podemos montarlo como debería en nuestra instalación habitual porque no cabe. Y los molinos son un ejercicio básico en nuestro deporte que las chicas no pueden hacer sin flexionar las piernas porque golpearían con el techo», lamenta Adrián Rodríguez. Luego en la competición el gesto técnico es distinto.
El cambio temporal, por lo tanto, tiene satisfechos a técnicos, deportistas y padres del Antares, aunque son conscientes de que la solución tiene fecha de caducidad. Por eso, han puesto en marcha una iniciativa para que los presupuestos participativos de la Generalitat incluyan un pabellón de gimnasia artística en el entorno de Quatre Carreres.
Y es que el Ayuntamiento tiene ya ideado un recinto para gimnasia artística en la ciudad: será el futuro pabellón de Benicalap, el que debe impulsar el Valencia CF, según quedó reflejado en la ATE de Mestalla. Ahí irían las escuelas municipales, la tecnificación y se concederían espacios a los clubes, especialmente al Antares y al Gymval.
En el caso del primero, quiere mantener sus instalaciones en la Fuente de San Luis. Esto es algo que el Antares ya dejó claro cuando se generó la necesidad de desalojar su sala de la Fonteta para que acoja la sala de prensa del Eurobasket. Se ofreció un traslado temporal al velódromo Luis Puig, algo que se rechazó. «Nosotros somos un club de barrio y realizamos una acción social. Vienen niños de familias con pocos recursos y lo tienen complicado para trasladarse», argumenta Adrián Rodríguez.
Quizás la solución definitiva venga con la apertura del Casal España, cuando el Valencia Basket libere la Fonteta. Generará espacio que se prevé destinar a varios clubes que lo reivindican desde hace años, entre ellos, el Antares.
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