Rossi reina en el paddock y Barberá vive un dulce final

Tan sólo la fulgurante irrupción de Marc Márquez ha conseguido discutir la figura de Valentino Rossi como auténtico rey del paddock. Ayer, tres horas después de finalizar la carrera de MotoGP, el camión de Yamaha donde el italiano se ha 'hospedado' en Cheste todavía estaba rodeado por los incondicionales del subcampeón de MotoGP. Desafiando a la lluvia, que arreció, y al frío, los fans de 'Il Dottore' intentaban a gritos llamar la atención de Rossi. Al italiano, que finalmente no apareció, le bastan unos cuantos gestos y su magistral clase en la pista para seguir conquistando a los amantes del motociclismo.

A uno de sus compañeros en MotoGP, Héctor Barberá, le supo a gloria el 11º puesto cosechado ayer en Cheste. «Enfocamos la carrera como pretemporada para 2015», dijo el valenciano el sábado. Pero su actuación en carrera distó mucho de esas declaraciones. Barberá sólo había sumado tres puntos en las quince primeras carreras del Mundial. Pero se ha desmelenado en las últimas tres citas. El de Dos Aguas fue quinto en Australia (once puntos), noveno en Malasia (siete) y sumó ayer otros cinco. En total, Barberá finaliza el Mundial con 26, en la 18ª posición. El cambio a Ducati le sirvió para ganar confianza de cara también a la próxima temporada. El objetivo, ser la primera Open.