Un talismán para que Marc Márquez gane su séptimo mundial de MotoGP

Rafael sufrió un tumor cerebral hace muchos años y tras varias operaciones su vida, y su energía, pilotan en una silla de ruedas. Un enamorado del motor no podía dejar pasar la opción de lanzar un guiño de buen rollo a una situación tan dramática. Su primera silla la tuneó con los colores de Honda, imitando la moto de Marc Márquez hasta convertirla en una réplica perfecta con todos los detalles. Así llegó a conocerle en un circuito e incluso se llegó a gestar una acción comercial que se llevó por delante la pandemia. Como tantas cosas en nuestra sociedad.

Ahora, en Cheste, se volvieron a reencontrar varios años después de todo aquello. «Ha sido una ilusión muy grande volver a saludarle. Los sueños en la vida hay que seguirlos para que se cumplan. Este reencuentro era uno de ellos», reconoció emocionado Rafael a LAS PROVINCIAS. El cordobés transmitió todo su positivismo a su ídolo con la intención de que se convierta en el mejor talismán para que consiga su séptimo título de MotoGP: «Le toca sonreír y disfrutar porque llevaba unos años pasándolo regular. Esta temporada con Ducati es suya. Tiene el talento y le faltaba una moto que le acompañara. He notado que vuelve a disfrutar. Puede pasar a las Ducati oficial y ser una bomba de relojería». Ahora, el sueño de Rafael, seguro que lo firma Marc, es repetir la foto con otra camiseta de campeón en noviembre de 2024 en el mismo lugar. De momento, tener al talismán en las gradas le sirvió para marcar el cuarto mejor tiempo en su estreno con la nueva moto.