Aprovechar la oportunidad como Álvaro

La vida deportiva de Álvaro Gimeno ha cambiado en este último mes. El 'II Trofeu Levante UD d'escala i corda', que levantó el de Massalfassar junto a Puchol II, significó su primer título como profesional. A sus 23 años, el pilotari sabe cuál es su lugar en la nómina y eso hace que aproveche cada oportunidad que dispone para desplegar su mejor juego, con una recompensa traducida en grandes resultados. «Sé que no me voy a ganar el sitio por un trofeo y trabajo cada día para lograr mi objetivo que es jugar en el medio y no ser un punter eterno», confiesa Álvaro.

Cuando fue elegido para participar en el Trofeo Levante UD, tuvo claro que era "el momento. Tenía que estar capacitado para jugar buenas partidas y ganarlo, ya que si Puchol II jugara con otro compañero, ganaría". Así fue, puesto que el binomio de la Horta Nord venció a Pere Roc II y Nacho por 60-40. No obstante, Álvaro cree que en la final "estuvimos todos discretos, excepto Nacho. En las eliminatorias creo que he rendido muy bien y hemos hecho una buena pareja. He hecho mi trabajo y lo he conseguido. Es lo que cuenta".

Y es que para asentarse como mitger profesional, antes hay que pagar el peaje de la punta. "El medio es mi posición natural, tengo un punto más de comodidad aunque sé que de punter no lo hago mal", explica el de Massalfassar. A pesar de ello, Álvaro reconoce que "si no rindes, es muy complicado quitar a los que son más fijos. Todos ellos han pasado por donde yo estoy. Siempre le comento a mis más cercanos que no tengo que pedir donde tengo que jugar, sino demostrarlo cuando me den las oportunidades. Es un procedimiento que tengo que aceptar. Todo llegará".

Una situación que en ocasiones suele ser problemática si no se sabe afrontar con normalidad. Álvaro fue semifinalista en la Liga de 2020, la de su debut, pero después estuvo unos meses sin entrar en la rueda profesional. "No se apostó por mí y anímicamente me afectó. Sé que hay gente por delante de mí que se lo merecía, pero yo también. Me lo tomé como un tema deportivo, nada personal. No fue una buena época pero soy joven y sé que el trabajo lleva su recompensa. Está llegando ahora", detalla el pilotari. Un problema que se agravó con la pandemia, ya que "sin partidas del día a día, solo quedaban los campeonatos para demostrarlo", comenta Gimeno.

Una lección para su vida deportiva a la que se sumó la derrota en la final de la Liga de 2021, donde el equipo de Álvaro llegó invicto. "Hay que aceptar la derrota. Me costó asimilar que habíamos perdido, tenía esa espinita de caer en la última partida. Quizá pagamos la falta de experiencia, pero sobretodo me quedo con el buen papel que hicimos a lo largo del torneo", analiza.