La pilota estalla al ser el único deporte de élite parado

La Lliga profesional de pilota tiene para la Conselleria de Sanidad la misma consideración que un partido de fútbol regional. Así se resume el hecho de que la vaqueta de élite –actividad protegida por la propia Generalitat como Bien de Interés Cultural (BIC)– siga parada desde el 21 de enero mientras la Comunitat sí ha acogido partidos y competiciones de primer nivel de otras modalidades. La Fundació estalló ayer ante esta doble vara de medir que el Gobierno autonómico justifica en que sólo se mantienen en pie los torneos de ámbito nacional, sobre los que no tiene competencias, ya que las ostenta el Ejecutivo central.

«Para próximas decisiones esperamos que la pilota de élite se trate con el nivel correspondiente y similar a otros deportes que sí están manteniendo la actividad», señaló la Fundació en un comunicado. El organismo que regula la vaqueta de primer nivel aceptó el primer parón de la Lliga (la competición por equipos más relevante en la pilota) en un momento casi de colapso sanitario. Sin embargo, antes del último decreto, el del pasado 12 de febrero, remitió sendas cartas a los consellers de Deportes, Vicent Marzà y de Sanidad, Ana Barceló. Se reclama retomar las partidas a puerta cerrada para poder completar con el calendario de 2021 y así cumplir con los acuerdos con patrocinadores.

La respuesta de Sanidad fue que no era momento de relajar las restricciones antes del 1 de marzo. Sin excepciones. Sólo pueden celebrarse eventos deportivos de índole nacional, regulados por el Gobierno. Ante esta situación, la Fundació intensifica su petición –lo dejó ayer por escrito en su comunicado– de que haya un marco legal que regule la figura del pilotari profesional.

«Es algo que venimos reclamando desde el inicio de la segunda ola», señalaba ayer Josep Maria Cataluña, presidente de la Fundació: «Ahora los pilotaris cuentan con la misma consideración de un deportista amateur y, sin embargo, tienen contratos profesionales. Es necesario solucionar esto por si, ojalá no, se da una situación como la actual».

Desde la Dirección General de Deportes no quisieron ser ayer beligerantes. Su coordinador de pilota, Sebastià Giner, aseguró que se han mantenido conversaciones con Sanidad. «Es una cuestión de competencias y ellos son los que tienen la información a la hora de imponer las restricciones. Nos queda aceptar los argumentos, otra cosa es plantear que la ley regule la figura del pilotari profesional, pero ahora priman las medidas sanitarias», señaló.

«Hemos hecho gestiones, pero es una decisión de Sanidad, que ha legislado sobre las competiciones que tiene competencias. Se ha apostado por la precaución hasta que la situación mejore», subrayó Giner, quien resaltó que la intención era retomar las partidas, pero no quiso cuestionar la decisión del departamento que dirige Ana Barceló.

Señaló que en la reunión interdepartamental de la semana pasada se puso sobre la mesa el asunto de la pilota. Hay poca fe en que Sanidad recule antes del 1 de marzo. Pero sí una indignación generalizada entre los jugadores por el hecho de que otros deportistas de élite sí estén compitiendo. Fuentes consultadas pusieron un ejemplo especialmente sangrante: la Copa Generalitat de balonmano, sí, disputada entre dos equipos de Asobal (el Fertiberia y el Benidorm), pero que es de ámbito autonómico, y que se celebró el 27 de enero.