Los polémicos arcos chinos en Pelayo se colocarán al inicio de Matemático Marzal

Los polémicos arcos chinos, proyecto que salió adelante con por medio de los presupuestos participativos con los votos de sólo 342 personas, se colocarán en el barrio de la Roqueta. No será finalmente en el acceso a la calle Pelayo desde la de Xàtiva, a escasos metros del trinquet considerado la catedral de la pilota, motivo por el cual se generaron las críticas. Se ubicará al inicio de la calle Matemático Marzal desde la estación del Norte. Esta es una de las opciones que se barajaban y que, slavo giro inesperado, se llevará a cabo.

Así se ha informado durante la presentación de una nueva propuesta para la calle Pelayo y que deberá pasar también la criba de los presupuestos participativos. Por ese motivo, la Fundació que gestiona la pilota de élite ha presentado este viernes el proyecto: se busca la complicidad de vecinos, comerciantes y aficionados a la vaqueta que a partir del 31 de marzo den su voto a esta iniciativa.

Como avanzó este periódico, se trata de un parque temático de la pilota en el entorno del trinquet. En 158 metros de calle, el estudio Janfri&Ranchal ha presentado un proyecto que incluye la representación de una partida de galotxa con estatuas de bronce, placas en los domicilios de los míticos expilotaris Rovellet y Fredi, y un paseo de la fama con las huellas de las principales leyendas del deporte autóctono. Para ello, Pelayo quedaría semipeatonalizada (con acceso para carga y descarga, emergencias y garajes) y como guinda, donde se proyectaron los arcos chinos habrá una obra de Manolo Boix representando las manos de Paco Genovés. Para esta iniciativa se ha tenido en cuenta las necesidades de la falla, que planta el munumento infantil en la calle de Pelayo y la grande en el cruce con la de Matemático Marzal.

Entre las novedades que se han expuesto en esta presentación, llevada a cabo en el trinquet de Pelayo, figuran unas estatuas y unas placas (todas van en cerámica) en reconocimiento a los niños que juegan en la calle. Es una forma también de homenajear a varias generaciones de pilotaris que llegaron a la élite después de crecer en el barrio y en la catedral: Rovellet, Alsina, Fredi, Tino, Grau, Miguelín, Solaz, Pastor, Pedro, Pedrito, Serrano, Víctor o Peluco.

También está previsto colocar unos paneles informativos, posiblemente con un código QR para que turistas o ciudadanos que realicen su primera aproximación a la pilota puedan escuchar una explicación grabada. A todo esto hay que añadir elementos como aparcamientos de bicicletas, carga y descarga, contenedores de selección de residuos... elementos que se ubican en cualquier reforma que se realiza en barrios de Valencia.

Esta semana se había decidido cambiar el arco por unas columnas en vertical, pero a día de hoy el formato sigue en debate. De hecho, en la presentación se ha insistido en que esta es una propuesta que puede modificarse. Los vecinos de la Roqueta, de hecho, en el turno de palabra, ha solicitado que la remodelación que, entre los dos proyectos, afectará a las calles de Pelayo y Matemático Marzal, se extienda a todo el barrio. Al tratarse este de un proyecto de la Fundació, se les respondió que deben elevar sus inquietudes a las concejalías de Movilidad y Urbanismo. Estas, de hecho, deben elaborar informes a favor (igual que la Patrimonio, dependiente de la Conselleria de Cultura) para que el proyecto se someta al voto de los presupuestos participativos.

La idea para el parque temático de la pilota es incluir, como guinda, el trinquet, propiedad en la actualidad de José Luis López. Ya se han iniciado los contactos con el empresario para que lo adquiera la Generalitat, aunque las negociaciones están aún en fase embrionaria.

No se ha hablado del dinero por el que vendería el mecenas de la pilota, el hombre que al adquirirlo evitó el cierre de Pelayo, la instalación deportiva en activo más antigua de Europa. La intención es que, gestionada por el Gobierno autonómico, sea sometida a una obra de insonorización (para evitar quejas vecinales ante espectáculos musicales o poder celebrar partidas por la noche). En esa intervención se aprovecharía para aislar la cancha de los rayos solares para poder proyectar un audiovisual explicativo sobre la historia y el reglamento del deporte autóctona, que completase el parque de la pilota.

Además, se están dando pasos para reactivar el proyecto de dotar de accesos al trinquet acordes con la normativa actual: cabe recordar que, cuando se vendió, existía el peligro de que si se daba de baja la licencia de actividad ya no la obtuviera. Se han mirado dos plantas bajas, una en la propia calle de Pelayo y la otra en Convento de Jerusalem.

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