Un triplete maldito en la pilota

Como gran dominador de la época en su modalidad, Puchol II ha dispuesto de varias oportunidades para conseguirlo. Este año, el número uno se adjudicó la Liga por segunda edición consecutiva, además de prolongar su mandato en el mano a mano. Mientras que en 2022, el de Vinalesa quedó eliminado en la fase de grupos de la Copa, este 2023 tuvo en sus manos el triplete. Sin embargo, la derrota en la final de la Copa contra Marc y Conillet alarga este maleficio. Una situación que ya vivió en 2020. En esa ocasión, Puchol II también levantó la Liga y el Individual, pero en la final de Copa, junto a Guillermo, Marc volvió a ser su verdugo.

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Otro jugador que estuvo a punto fue Moltó, en este caso en la modalidad de raspall. Al igual que Puchol II, el de Barxeta fue el gran dominador de su disciplina a finales de la década pasada. Fue en el año 2017, cuando Moltó rozó el triplete con la punta de los dedos. Primero se proclamó campeón de la Liga, junto a Brisca, pero en esta ocasión el calendario sería diferente. La Copa se disputó en el mes de julio y Moltó repitió éxito, ahora al lado de Dorin. Solo quedaba el Campionat Individual que había ganado en las dos ediciones anteriores y donde era el máximo favorito. Era el mes de noviembre cuando Moltó jugó la final ante Ian. Sin embargo y contra todo pronóstico, el vencedor fue su rival. Moltó se quedó con la miel en los labios y aunque continúo escribiendo un legado histórico en la pilota, nunca más tuvo tan cerca el triplete. Si que es cierto que en 2018, el de Barxeta conquistó el mano a mano y la Copa, pero cayó esta vez en la final de la Liga, de nuevo frente a Ian. No obstante, la Liga fue la competición que abrió dicha temporada y la opción del triplete se esfumó de primeras.

Con todo esto, habrá que esperar al 2024 para ver si se rompe el maleficio de un récord que aún no llega en la pilota profesional.