Las vidas paralelas de Puchol II y Tonet IV

Ganar el Campionat Individual supone adjudicarse el título más emblemático de la temporada y comporta un privilegio: vestir durante todo un año de rojo, el color que significa a los campeones. Al vencedor del mano a mano se le considera el número uno de su modalidad, pero este galardón añadido ha generado más de un debate entre los habituales del trinquet. Y es que esta es una situación que hay que demostrar más allá de una competición y durante bastante más tiempo que el mes de duración del torneo. También, el número uno es aquel que para la configuración de las partidas concede al rival a un compañero de más entidad que el suyo o en mejor forma en ese momento puntual.

Puchol II en escala i corda y Tonet IV en la disciplina de raspall son los recientes vencedores del mano a mano. Los nuevos números uno, corona que el resto de Vinalesa luce por tercera ocasión y que el punter del Genovés ha estrenado, además la primera vez que ha querido participar en el mano a mano. En ambos casos no hay lugar al debate. Cierto es que ahora deberán portar tan apreciada losa hasta la próxima edición del campeonato, pero en el año en curso han sido los auténticos dominadores de la pilota profesional.

La supremacía de Puchol II viene de lejos aunque el escaleter de Vinalesa ha tenido que compartir méritos y títulos en algunas de las pasadas temporadas con homólogos como Soro III, Pere Roc II y De la Vega, amén del imprescindible Genovés II. Este año 2020, sin embargo, no ha habido nadie que le tosa.

Independientemente de los resultados, que han sido magníficos, el nivel de Puchol II ha estado muy por encima de cualquiera. Además ha logrado lo más complicado, mantenerlo sin altibajos durante toda la campaña. Los rebotes dibujados, la precisión para acometer la vaqueta y la capacidad para pasarlo todo con criterio son algunas de las muchas virtudes que le han permitido ser el mejor.

Por su parte, Tonet IV también viene demostrando desde hace algún tiempo que está llamado a ser uno de los más grandes. Con veintidós años, por los veintinueve de Puchol II, su eclosión es más reciente y hasta esta temporada de absoluta hegemonía también ha tenido que alternar los elogios con puntas contrastadas como Sanchis, Brisca, Seve e incluso Canari, cuando el de Xeraco está de dulce. Este curso, sin embargo, nadie ha podido igualar su capacidad para definir, su velocidad de vértigo y la contundente y espectacular pegada con la pelota remontando que siempre busca cosas.

Las de Puchol II y Tonet IV han sido dos vidas paralelas en el concierto de la pilota de élite en el curso que ahora toca a su fin. Ambos conquistaron la Lliga siendo la punta de lanza de sus equipos y en el Individual ha estado excelsos. Además, los dos se han quedado a un pequeño paso de firmar la temporada perfecta ya que Puchol II perdió la final de la Copa mientras que Tonet IV se quedó a un juego de disputarla.