Tebas y el Valencia pierden el pulso por el reparto del dinero de la Copa

Aquella edición fue la primera en la que se estableció un concurso entre aspirantes para albergar el evento deportivo, con una indudable repercusión económica para la ciudad que acoge el acontecimiento, pero también para los clubes involucrados. Entonces se presentaron el Betis y el Valencia. La historia es conocida. Ganó la primera opción. Una de las mejoras que pudo decantar el proceso fue que la entidad andaluza ofreció renunciar a un mayor porcentaje de los denominados derechos de compensación. El Valencia, una vez analizó la liquidación de las ganancias entre los clubes participantes, envió una comunicación urgente a LaLiga.

No estaban de acuerdo con el reparto final. Inmaculada Ibáñez, directora financiera del club de Mestalla, trasladó sus sospechas a LaLiga acerca de las supuestas irregularidades que había detectado. 

El organismo que preside Javier Tebas denunció los hechos en la Fiscalía de Valencia, que abrió unas diligencias de investigación penal que han concluido recientemente. El ministerio público disponía de seis meses para efectuar las correspondientes pesquisas y aclarar los hechos que, en teoría, perjudicaban gravemente al Valencia. La disputa se concretaba en un millón de euros que recibió la Federación en concepto de alquiler del estadio, lo que no dejaba de ser los derechos de compensación que previamente había cedido el conjunto verdiblanco.

El club de Mestalla sostenía que de esa cantidad al menos un tercio debería ingresarse en las arcas valencianistas. Otro tercio, alrededor de 300.000 euros, irían para el Barcelona y la cantidad restante, supuestamente, para la Federación. En definitiva, se oponían a que el organismo que dirige Rubiales se embolsara un millón de euros por este evento. La denuncia de Tebas, aparte de contra el presidente, se dirigía también contra el secretario general y el máximo responsable del departamento financiero.

Tras una exhaustiva investigación, la denuncia se formalizó a finales del año pasado, la Fiscalía ha dado carpetazo a las actuaciones. Considera que no se dan los requisitos de la estafa, por ejemplo lo que se conoce como engaño bastante, porque el Valencia desde el primer momento de la convocatoria del concurso conocía las condiciones en las que se presentaban ambas entidades y las posibilidades de las mejoras. De igual modo, se sabía de antemano que el beneficiario sería la Federación, que ha visto en la competición deportiva una nueva forma de aumentar sus ingresos.

Tebas y Rubiales son viejos conocidos de la Ciudad de la Justicia de Valencia. El primero ya declaró como testigo por la denuncia que presentó La Liga por el supuesto amaño del Levante-Zaragoza. El juicio por estos hechos terminó en una absolución ante la falta de indicios de que los jugadores granotas cobraron una comisión por dejarse ganar. Luis Rubiales acudió recientemente por problemas de índole más personal. El exdeportista mantiene un conflicto con la arquitecta de la reforma de su casa en Valencia a quien ha denunciado por acoso. Todavía no existe sentencia por este asunto.