Madrid, tierra movediza para Garbiñe Muguruza

«Parece que cuando mejor lo quiero hacer peor se me da». Las palabras de Garbiñe Muguruza (Caracas, 8-10-1983) antes de empezar el Masters 1.000 de Madrid resultaron proféticas. La hispano-venezolana, número 20 del ranking WTA, nunca había superado la segunda ronda en la capital española y en 2015 se repitió la historia. No obstante, en su última participación se entregó con voluntad de no caer ante el público que animó a la jugadora local en la pista Manolo Santana de la Caja Mágica. La caraqueña, de padre vasco, se empleó con esfuerzo durante dos horas y 32 minutos en un período poco frecuente en los partidos a tres sets del circuito femenino.

«Estás dudando, te quedas a medias. Cambia el ritmo de las piernas, mete intensidad, entra y sal, y cuando puedas juega la bola rápido, las piernas a tope, el partido está en tus manos», le arengó su entrenador, Alejo Mancisidor, antes de que la espigada joven volteara una segunda manga que perdía 4-2 para apuntarse el set. Finalmente perdió ante Svetlana Kuznetsova, una experta en la tierra batida -ganó Roland Garros en 2009 y fue finalista en 2006-, con un resultado de 6-3, 5-7 y 7-5. La tenista que entrena en Barcelona acumuló solamente un 38% de puntos ganados con el segundo servicio, un 30% de bolas al resto y hasta diez dobles faltas ante la veterana rusa en la jornada matinal que se completó con sólo una española en la siguiente ronda: Carla Suárez.

De esta manera Muguruza se despidió de un torneo en el que inició su maldición en 2012 contra Na Li. No obstante, en esta ocasión pudo disfrutar del apoyo del público en la pista central de La Caja Mágica y recibir el cariño de los aficionados en un 'clínic' efectuado el día anterior con futuras promesas del tenis español. Además, la hispano-venezolana cuenta con una bala en la recámara, puesto que en el cuadro de dobles sigue adelante con Carla Suárez después de vencer a Groenefed y Panova por 2-6 y 2-6 en menos de una hora en el turno de tarde. «El doble a veces te ayuda a olvidar el individual. Por eso hoy, aunque ha sido un día malo, acaba con una sonrisa», aseguró Muguruza en rueda de prensa tras recordar que el año pasado fue finalista.