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MOISÉS RODRÍGUEZ
VALENCIA.
Lunes, 20 de septiembre 2021, 01:28
Martina Trevisan, una de las sensaciones de Roland Garros de 2020 al alcanzar los cuartos de final, no es de bailar al ritmo de nadie. Ella quiere marcar la pauta, como demostró con la danza que le sirvió para celebrar su título en el ITF 80.000 BBVA Open Internacional de Valencia y, de paso, meterse en el bolsillo al público que llenó la grada del Sporting Club. «Me encanta la ciudad, su clima, su gente, ojalá pueda jugar aquí el año que viene», dijo la italiana en su despedida.
Y esa, la presencia de gente, fue la gran victoria del tenis. Lo destacó Trevisan, pero también su rival, la húngara Dalma Galfi: «Llevábamos mucho tiempo jugando sin público, se agradece la presencia de espectadores». La magiar quiso marcar la pauta y su break a las primeras de cambio le dio el primer set (6-4). Pero se negó a que el partido se desarrollara bajo la batuta de su oponente.
Ya al final de esa manga se vio que la transalpina había elevado el nivel. Eso le sirvió para llevarse el segundo, que dominó pero que a punto estuvo de enredarse ante la reacción tardía de Galfi (6-4). En el tercero, la italiana ya sí fue un ciclón para endosar un duro rosco (6-0) a la húngara. La tenista de 27 años se llevó un título que hoy le permitirá alcanzar el mejor ránking WTA: la 75. En la final de dobles, la valenciana Ángela Fita, junto a la rusa Oksana Selekhmeteva, perdió la final ante Bonaventure y Gorgodze por 6-2, 2-6 y 10-6.
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