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«¡Una vergüenza y un robo!». Fueron las palabras más escuchadas en la Fonteta, en todos los sectores y zonas del pabellón, tras acabar el ... encuentro. Entendible, además, que el Valencia Basket aguantara la rabia para no protestar de forma oficial, de momento, a la Euroliga puesto que no deja de ser un invitado a la fiesta que fue perjudicado por un arbitraje que favoreció... a uno de los dueños de la fiesta. Fin de la cita. Durante el partido, la indignación fue creciendo a medida que crecía la diferencia en faltas (24-17) y en tiros libres (15-29) en un partido durísimo de los dos equipos. Ojo, y precioso. Con 81-81 en el marcador, Harper se jugó el tiro ganador, un triple, a tres segundos pero el balón lo escupió el aro. ¿Prórroga? No. Jovcic decidió pitar una falta de Davies sobre Lessort en la otra parte de la jugada. La repetición, desveló que Lessort también le pegó un codazo a Brandon. Como la actual norma del Instant Replay no permite revisar lo no pitado, el francés anotó un tiro libre para poner el 81-82. Con 1.9 por jugar, Ojeleye tuvo tiempo de tener la opción de ganar pero el balón no entró. Ganó el Panathinaikos, sí, pero el Valencia Basket demostró que va a luchar por el Top 6. Sí, por el que da acceso al playoff. Hay, además, cuatro puestos de repesca. «Si la hubiera metido sería ídolo por la canasta», señaló Mumbrú sobre el último tiro de Harper después de reconocer que la jugada inicial era buscar una entrada a canasta. Sobre la polémica arbitral, antepuso el orgullo de su equipo por el juego mostrado: «No va en mi estilo llorar en la pista ni en la rueda de prensa y me gusta que mis jugadores también hablen en la pista y no fuera. Como no me gusta que lo hagan ellos tampoco yo». Lo que sí que ponderó es la lucha de sus jugadores: «Estoy muy orgulloso de mis jugadores, del equipo y de la Fonteta por cómo ha apretado. Orgulloso por la lucha que hemos mostrado durante los cuarenta minutos. Lo hemos dado todo».
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Antes de la decisión que marcó el partido, Ataman forzó la cuerda. Sabiendo que nunca se suele romper. Con 80-79, a falta de 34 segundos, Jones recibió una falta de Grant que rozó la antideportiva. Los árbitros no lo consideraron y, además, no señalaron técnica a Ataman (sí a Mumbrú en el segundo cuarto) cuando estaba avisado y protestó una acción no señalada al propio Jones. Vildoza empató el partido poco después (80-80) para que el triunfo heleno se decidiera por la acción ya explicada de la falta señalada a Lessort.
Tras un primer cuarto de tanteo (23-22), el Valencia Basket apretó (33-26) pero el Panathinaikos contestó con un parcial de 3-11 (36-37) y el partido se marchó al descanso con un 47-47 y una bronca de la Fonteta a los árbitros. Premonitorio. El equipo griego puso su máxima renta (50-59) y ahí apareció Harper. El americano revolucionó la pista con un 0-10 (60-59) y esa buena dinámica siguió hasta el 73-66. Desde ahí, sucedieron muchas cosas. También errores taronja.
Valencia Basket: Jones (10), Robertson (6), Ojeleye (13) Inglis (7) y Reuvers (7), quinteto titular, Davies (10), Pradilla (2), Jovic (5), Anderson (4), Harper (12), López-Arostegui (5) y Puerto (-).
Panathinaikos: Nunn (7), Grigonis (11), Grant (13), Mitoglu (11) y Lessort (12), quinteto titular, Juancho Hernángomez (4), Kalaitzakis (-), Vildoza (19) y Kostas Antetokounmpo (5).
Parciales:23-22, 24-25 (47-47), 22-19 (69-66)y 12-16 (81-82).
Árbitros: Mehdi Difalla, Milivoje Jovcic y Seffi Shemmesh.
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