Reacción de equipo grande en Vitoria

Es un topicazo tremendo pero se ajusta a lo que ocurrió en Vitoria. El Valencia Basket resucitó el domingo tras una semana de pasión en la que se había llevado dos golpes en las visitas a Bilbao y Sevilla. La victoria en el Buesa, a cinco partidos para que termine la Liga Regular, vale triple; permite a los taronja volver a ponerse tercero (puesto que en un múltiple empate con Manresa, Tenerife y Joventut los de la Fonteta serían primeros al tener un balance de 5-1 en esa liguilla), ganarle el average al Baskonia y respirar en una semana clave donde arrancan las eliminatorias de la Eurocup. A nivel histórico, se cerró una racha de seis derrotas seguidas en Vitoria y de ocho años en Liga Regular, el anterior triunfo era de 2013 con una canasta sobre la bocina de Doellman (78-79).

«Veníamos de perder con Bilbao y Betis y parecía que era un desastre pero esta Liga es muy exigente y complicada. Le doy mucho valor pero en absoluto pienso que sea una victoria clave, nos ayuda a seguir en las primera posiciones. Somos muy dados a fustigarnos cuando perdemos y a no disfrutar cuando ganamos», fue la valoración de Peñarroya. Su gesto al descanso era otro, el perfecto resumen de los últimos seis minutos de su equipo; incredulidad. Del Valencia Basket imperial, con el regreso de Van Rossom, que estaba pasando por encima del Baskonia (14-34 como máxima renta) la diferencia quedó reducida a once al paso por vestuarios tras el parcial final de 20-11 para el Baskonia (34-45). Curiosamente, el mismo pero invertido con el que los taronja firmaron un primer cuarto muy serio (11-20) que dejó patente las ganas de firmar un partido sólido después de las decepcionantes derrotas de Bilbao y Sevilla. La amenaza en el triple en el segundo cuarto había permitido a los valencianos pegar el estirón pero la aparición de Giedraitis y de Fontecchio fue el aviso doble del Baskonia de cara al arranque del tercer cuarto.

El Baskonia estiró su racha, hasta un parcial abierto de 51-27 que terminó con una técnica a Dubljevic (65-61) y ahí emergió el carácter de equipo grande de los taronja. Eso vale más que un triunfo. Con López-Aróstegui clave en la anotación, con 20 puntos y que había sido duda al torcerse el tobillo izquierdo en una sesión previa, y Hermannsson ejecutando (71-78) el Valencia Basket se llevó un triunfo que vale oro, existen más interpretaciones que la del técnico taronja, en la lucha por ser cabeza de serie en el playoff, primero, y tercero, después. Ahora espera el Hamburgo en la Eurocup.