La Fonteta sabe sufrir

Juan Carlos Villena

Valencia

Domingo, 20 de marzo 2022 | Actualizado 21/03/2022 01:02h.

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Cuando López-Arostegui anotó el 77-71 a falta de 28 segundos, nadie en la Fonteta podía imaginar que quedaba un final taquicárdico... pero así de especial es el deporte de la pelota naranja. Una canasta más adicional de Bone (77-74) llevó a un carrusel de tiros libres donde el de Nashville, el mejor de su equipo con 27 puntos, puso un poco más de pimienta con un triple (79-77).

Esa cadencia continuó hasta el 81-79 con una falta sobre Dubljevic con tres segundos y tres décimas en el crono. El montenegrino falló el primero, falló el segundo, San Miguel capturó el rebote y asistió en carrera a Bone, que tuvo tiempo de cuadrarse para lanzar un triple ganador... que escupió el aro sobre la bocina para respiro de la grada.

Ese final fue el mejor símbolo de una semana de tres partidos en seis días donde el Valencia Basket ha sabido sufrir en casa para llevarse tres victorias muy importantes, dos en ACB y una en Eurocup. Conviene no olvidar, aunque la desgracia parece que ya es perenne en los taronja este curso, que todo ha ocurrido con tres bajas (Dimitrijevic tiene para varias semanas por el tipo de virus que padece). El triunfo permite a los taronja seguir dependiendo de sí mismo para ser cabeza de serie en el playoff y, con el Real Madrid en caída libre, a dos victorias del segundo.

El plan de partido, con el desgaste de la semana, estaba claro; imprimir un ritmo alto de inicio para intentar dominar el resto cuando comenzaran a fallar las piernas pero los taronja, para desespero de un Peñarroya que gastó sus tiempos muertos de la primera parte para incidir en ello, no aprovechó la tendencia que marcó el arranque del partido (11-2, 29-17 y 35-22) para marcharse al descanso con una renta mucho más cómoda. Tan sólo Prepelic, 3 de 4 en triples, mostró acierto y el 1 de 9 que firmaron el resto de sus compañeros, unido al despertar de Bone, propició un parcial de 1-12 que metió de nuevo al Zaragoza en la lucha por el triunfo (36-34). Aunque la última canasta que subió en el segundo cuarto fue taronja (38-34), la cara de disgusto del técnico de Terrassa era clara. Tras la victoria, así lo reconoció ponderando el esfuerzo de los suyos en una semana al límite: «Si juegas tres partidos en una semana sin bases y sin Víctor (Claver)... queremos jugar mejor, tendríamos que haber jugado mejor en los momentos que podíamos haber roto el partido y les dejamos volver a entrar pero es evidente que con el tute que llevamos, en las condiciones en las que estamos, tiene mucho mérito haber ganado los tres partidos de esta semana. Nos vienen semanas donde todos los partidos son importantes y queremos estar arriba, en un año donde llevamos 105 bajas acumuladas».

El Zaragoza saltó a la segunda parte sabedor de que se le había abierto una puerta que parecía que estaba cerrada y logró remontar (49-52). Es ahí donde sacaron el orgullo los valencianos, con la figura emergente de Tobey. Un parcial de 14-2, con nueve puntos del americano, volteó el marcador hasta el 63-54 que se quedó en un 63-57 al final del tercer cuarto. El equipo maño volvió a apretar (66-66) para llevar el encuentro a un final de infarto que acabó sacando con mucho sufrimiento el Valencia Basket. La lectura de la semana también deja la evidencia de que hay piezas importantes, como Dubljevic, que no atraviesan su mejor momento. Para rematar, toca viaje largo y pesado a Bursa.