El mejor Hermannsson toma el mando

Juan Carlos Villena

Valencia

Viernes, 1 de abril 2022, 21:21 | Actualizado 23:29h.

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En los momentos difíciles es cuando emergen los líderes de los equipos. Con Dimitrijevic enfermo y Van Rossom y Prepelic lesionados, Martin Hermannsson sabe que es su momento. Con la camiseta del 24, un homenaje a la 'mamba mentality' de Kobe, el islandés se marcó un escándalo de partido. Anotó, dirigió y fue el líder en la pista. Ese que siempre quiso ser cuando llegó desde Berlín para cumplir su sueño de niño, que no era otro que jugar en el Valencia Basket donde lo hizo años atrás su tío, Jon Stefansson. Aunque su último arreón parecía decisivo (85-78) una antideportiva de Tobey sobre Shermadini y un triple de Wiltjer obligó a no fallar desde el tiro libre en las últimas jugadas (87-85). Ahí apareció un sólido López-Aróstegui para apuntalar una victoria que permite a los taronja seguir dependiendo de sí mismo para ser tercero de la ACB, puesto que en un triple empate con el Manresa y el Joventut estaría el primero.

Mención aparte merece Labeyrie. Si en lo malo lo tiene, en lo bueno es de recibo que también. El francés aportó intensidad, rebote e incluso defensa sobre Huertas para, también, firmar su mejor partido del curso. En una noche de fiesta, un campeón de Liga como Sastre se llevó la ovación que se merece, como también la recibieron Vidorreta y Doornekamp. Memoria histórica con la gente que hizo grande a un club. Eso vale más que los títulos. Como el cariño a Prepelic. Fueron cientos los guiños que tuvo el esloveno en su regreso a la Fonteta tras su operación en el brazo. El más importante, por su simbolismo, de Juan Roig. Que nadie dude que, cuando toque, su contrato será renovado.

Tras un primer cuarto de tanteo (20-18), con muchas imprecisiones en los ataques que desesperaron a ambos técnicos, el Valencia Basket pasó por encima del Tenerife en un segundo cuarto perfecto (27-11 para la máxima renta al descanso con el 47-29). Para que sucediera, el nivel sobre la pista de Hermannsson fue la clave. El islandés, que ya evidenció en Eslovenia que ha recuperado su mejor nivel tras estar varias semanas enfermo, sacó su versión más asesina con tres triples y una canasta más adicional que cotizará como de las mejores de la temporada. El gran relevo de Ferrando, dirigiendo y anotando 5 puntos, permitió mantener el listón del puesto de base (el más mermado) muy alto. El único momento raro de ese cuarto llegó con el cambio de Labeyrie cuando el francés estaba con un +20 en el +/- en pista, es decir teniendo mucha incidencia sobre el parquet. El francés no escondió su gesto de enfado a Peñarroya, que no abandonó hasta que se marchó por el túnel.

Ese momento, que el francés transformó en mentalidad competitiva, fue clave unos minutos después. Antes de todo eso, al Valencia Basket le tocó sufrir porque Huertas sacó su mejor versión en el tercer cuarto, la que le está llevando a ser uno de los mejores jugadores de la ACB a sus 38 años. Tras la máxima renta taronja (52-33), un parcial de 4-14 acercó al Tenerife (56-47). El paso al frente de Todorovic, y un despiste de Dubljevic, acercó a los canarios a cinco al final del tercer cuarto (67-62). ¿La clave? Los de Vidorreta no remontaron, sólo empataron 73-73. Psicología.