Derrota para iniciar la ACB y otros dos jugadores lesionados

El Valencia Basket arrancó la Liga Endesa con derrota, en un partido con muchas pérdidas (41 entre los dos equipos y 20-21 en el balance) donde los dos equipos evidenciaron sus carencias. Las valencianas, su estado físico. A las bajas de López-Aróstegui y Rivero se unió la de Prepelic, con un esguince de tobillo el viernes que el técnico cifró como baja «para semanas», y de Van Rossom. «Me parece que se ha roto», comentó Peñarroya nada más terminar el encuentro. La evidencia, más allá de la mejora desde la Supercopa, es que los de la Fonteta necesitan recuperar jugadores, o fichar, si quieren competir. Sin más.

En un partido de detalles y muchos errores, desde el 63-61 un parcial de 4-11 del Baskonia sentenció el partido (65-70) con Costello como ejecutor. Dimitrijevic acortó la renta (67-70) pero otra canasta de Costello, tras revisión de Replay, sentenció el choque. Aunque el partido comenzó con cinco consecutivos de Dubljevic (5-0), muy pronto quedó claro que el plan de partido de Ivanovic pasaba por poner un listón físico que no estuviera al alcance de los taronja. En el primer cuarto, los de Peñarroya supieron capear el temporal (19-19) pero tras el 22-19 todo cambió. El Baskonia subió aún más la línea de defensa y el bloqueo para los locales llegó cuando se evidenció que no iba a pitarse ningún contacto. De esa trampa mental no supo escapar el Valencia Basket y el único vaso lleno fue que el Baskonia no aprovechó la anomalía de acabar un cuarto sin ninguna falta señalada para romper el partido (30-36). Un parcial de 19-8 en el tercer cuarto, con un gran Puerto, permitió remontar (54-48) pero los vascos acabaron llevándose el partido.

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