Por segundo viaje europeo consecutivo del Valencia Basket, uno de sus jugadores tuvo que quedarse en tierra al dar positivo por coronavirus. Si en el desplazamiento a Venezia fue Van Rossom, el caso con el que arrancó el brote taronja de diciembre, hoy ha sido Labeyrie. El francés dio positivo en la prueba previa al partido de mañana contra el Ratiopharm Ulm con lo que no se ha subido al avión comercial, la entidad sigue sin viajar en chárter en la Eurocup pese a los riesgos de la sexta ola, que ha llevado a los valencianos hasta territorio alemán.
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El positivo de Labeyrie se une al de Dimitrijevic como los dos casos activos en el Valencia Basket, después de recuperar a Hermannsson y Millán Jiménez para el partido contra el Unicaja. El macedonio, si da negativo al regreso del trabajo del primer equipo tras el partido en Ulm, tiene opciones de volver el domingo contra el Barcelona. Lo que queda claro es que esta temporada, por unos motivos u otros, Peñarroya aún no ha podido disponer de su plantilla completa. Aún no siendo lesiones, las bajas por Covid-19 siguen siendo bajas con lo que el técnico taronja tendrá a nueve jugadores profesionales para disputar la última jornada de la primera vuelta de la Eurocup porque Claver, que ya ha comenzado a realizar trabajo de pista en solitario, sigue sin tener el alta médica de su lesión.
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