L'Alqueria, tres años dando sentido al baloncesto

Cuenta Mari Ángeles Vidal que representantes de las ciudades candidatas a acoger la Fase Final Extraordinaria de Liga Endesa le reconoció que, una vez visto el despliegue en Valencia, «no iban a ser capaces ni de igualarlo». La coordinadora de L'Alqueria del Basket, donde se ubicó el centro médico avanzado en el desenlace de la competición, estaba ayer de aniversario. Ella, la familia de Valencia Basket y todos los que forman parte del proyecto de mecenazgo deportivo de Juan Roig, además de la sociedad valenciana, celebraron el tercer cumpleaños del recinto que es mucho más que un centro deportivo.

Con la Cultura del Esfuerzo como lema vertebrador, la temporada 2019-2020 estará marcada por la pandemia. Pero también por la capacidad de reinventarse de un grupo humano formado, entre otros, por las 753 personas que forman parte del Valencia Basket. La Fase Final de la Liga Endesa puso a prueba la capacidad organizativa de la candidatura. Cumplió con creces el club taronja. «Inventamos el concepto de burbuja sanitaria», afirmaba José Puentes. El director de Operaciones y Relaciones Instituciones de la entidad presidida por Vicente Solá, que tampoco faltó al acto, recordó que la inversión requerida en L'Alqueria del Basket la campaña concluida fue de 1,6 millones de euros, una cifra parecida a la de la anterior temporada: «Hubo ingresos por 600.000 euros, una cifra inferior a la esperada por la crisis sanitaria de la Covid-19».

Vidal recordó que la «NBA» o «seleccionadores de diferentes países» vieron en Valencia el espejo en el que mirarse. Sin embargo, L'Alqueria ha sido mucho más. La instalación retomó los entrenamientos «antes que nadie tras el confinamiento» y en ella también tuvo lugar la primera rueda de prensa presencial.

Durante el periodo más duro de la crisis sanitaria, el club taronja quiso estar al lado de los suyos y desde el edificio se aprovecharon las nuevas tecnologías con la realización de «más de 1.150 videoconferencias y entrenamientos telemáticos, más de 40 actividades de formación, 65 reuniones de gestión, 25 vídeos de consejos abiertos a los aficionados de los profesionales de la instalación y 8 jornadas de formación de técnicos para todos los públicos».

El tercer año de vida de L'Alqueria será siempre inolvidable para Guillem Ferrando, quien inscribió su nombre en el Mur dels Somnis. Después de 6 años en la cantera taronja, el base se estrenó en el primer equipo, fue en la Euroliga. Él es el futuro, como también el proyecto de L'Alqueria, que tras consolidarse piensa en seguir creciendo, ser un referente en Europa. A largo plazo, la instalación contará con un vecino que todos desean tener: el Casal Arena España de Valencia. Otro sueño basado a punto de convertirse en realidad.