![Valencia Basket: atrapados en Timisoara](https://s2.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/201811/22/media/cortadas/valencia-basket-viaje-dT17-kj9F-U601655599884c2H-624x385@Las%20Provincias.jpg)
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El Valencia Basket ha vivido este jueves una de esas odiseas que, de tanto en tanto, jalonan el imaginario que comenzó en la Copa Saporta y que ahora tiene su continuidad en la Eurocup. En el presupuesto de los equipos españoles que no disputan la Euroliga, no sólo afecta a los valencianos, los viajes se realizan en vuelos regulares puesto que los ingresos de las competiciones no dan para planificar vuelos charter, a menos de que se quiera ampliar ese presupuesto de gastos. Cuando la entidad de la Fonteta cerró el desplazamiento a Belgrado, las dos únicas combinaciones que le dejaban el jueves en Valencia tenían sus pros y sus riesgos.
El Valencia Basket, tras la mala experiencia de Ankara, optó por el descanso de la plantilla. En el viaje a Turquía, los jugadores durmieron poco más de tres horas para poder completar el retorno a España. Para evitar la falta de descanso, los valencianos activaron una ruta cercana, que se manejó en su momento en los viajes a Vrsac para jugar contra el Hemofarm. El equipo salió ayer de su hotel en Belgrado a las 8 de la mañana, una hora decente que permitió descansar a los jugadores tras el triunfo ante el Partizan, para recorrer los 150 kilómetros que separan la capital serbia de Timisoara, en Rumanía, para comenzar a las 12:40 el regreso a Valencia vía Frankfurt. Los tiempos cuadraban, pero el celo policial les jugó una mala pasada.
Para cruzar la frontera rumana desde Serbia hay que cruzar dos controles, uno en cada país. En el lado serbio comenzó a gestarse el problema. Cuando el delegado del equipo, Alfonso Castilla, bajó del autobús para entregar todos los pasaportes, como es habitual en viajes de grupos deportivos, se encontró con la negativa de los policías que estaban en la torre de control, que obligaron a la identificación uno a uno de cada miembro de la expedición. Ese retraso, unido a la demora en el lado rumano, complicó la vida al Valencia Basket, que cuando llegó al aeropuerto de Timisoara ya había finalizado el límite para poder embarcar.
El cambio de planes no afectó a la vertiente deportiva puesto que el jueves por la tarde no estaba planificado ningún entrenamiento en la Fonteta. Ponsarnau optó por no variar la rutina para, al menos, no cargar físicamente a su plantilla. La tarde libre se mantuvo... pero cambiando Valencia por Timisoara. La única variación en el plan de trabajo previo al partido ante el Delteco fue cambiar la sesión matinal prevista para el viernes en la Fonteta por una vespertina. El Valencia Basket, si no hay contratiempo, viajará en un vuelo directo, operado por WizzAir, con salida a las 13:10 hora local y llegada a Manises a las 15:20 del viernes. Los taronja no solicitaron el aplazamiento del partido de la Liga Endesa pero, según EFE, sí que trasladaron a la ACB lo sucedido por si hubiera algún nuevo percance.
El único 'consuelo' que le quedó a la expedición comandada por el director general, Paco Raga, y el director deportivo, Chechu Mulero, es que la otra alternativa para regresar de Belgrado hubiera sido demoledora en el aspecto físico para la plantilla que, al menos, descansó desde mediodía en un hotel tras el cambio de planes. El plan de regreso alternativo comenzaba con la salida del hotel de Belgrado a las 3:30, sin apenas descanso, para volar hasta Amsterdam y conectar con Madrid y Valencia. El vuelo desde la ciudad holandesa hasta España estuvo retrasado dos horas con lo que también quedó anulada esa conexión. A la parte de la expedición que optó por esa vuelta le tocó esperar en el aeropuerto hasta regresar a Valencia a las 22 horas.
Bojan Dubljevic y Rafa Martínez siguen su lento camino en busca de romper todos los registros estadísticos del Valencia Basket. El montenegrino consiguió un nuevo hito en Belgrado. Gracias a sus 12 rebotes frente al Partizan, el pívot ya es el jugador que más rechaces ha capturado con los valencianos en los partidos europeos, dejando su registro en 625. Dubljevic ha superado a Hopkins, que ahora es segundo con 613, mientras que el tercero es Tomasevic, con 390. Por su parte, Van Rossom llegó al Top 10 histórico en anotación, con sus 20 puntos en el Pionir, y está a tan sólo uno de ser el décimo jugador en la historia del club en anotar 2.000.
Trastornos al margen, el cansancio no le resta dramatismo al partido de mañana donde Ponsarnau, tal y como reconoció en Belgrado a este periódico, sabe de la trascendencia: «Tengo que aprender a vivir cualquier momento. La de Tenerife fue la derrota más dura de mi carrera. Mi cargo siempre está cuestionado y sujeto a que puedas irte a casa en cualquier momento».
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