Ouviña: «El mejor título sería que la gente volviera a disfrutar en los pabellones»

Cristina Ouviña (Zaragoza, 1990) regresa a España tras ochos años luchando fuera de casa en un momento dulce de su carrera –bronce en el último Mundial y oro en el Eurobasket– y como símbolo del paso al frente del Valencia Basket para la temporada 2020-2021. Su madurez le permite afrontar temas como el de la igualdad de género en el deporte alejado del idealismo y con las ideas claras. Paso a paso.

–Entrevistas con mascarilla. Mejor que por teléfono pero el símbolo de una nueva realidad.

–Sí, es un buen símbolo de que estamos en un mundo diferente y mejor que nos acostumbremos porque creo que va para largo.

–¿Cómo se vive fichar por un equipo en medio de una desescalada por una pandemia?

–En mi caso lo que puedo decir es que estoy contenta porque conozco jugadoras que siguen sin equipo por la incertidumbre que hay con temas de patrocinio. Estoy tranquila porque he fichado por un club como el Valencia Basket que estoy viendo además cómo trabaja.

–¿Vamos a la Liga Femenina más potente de los últimos años?

–La pasada temporada ví la Copa de la Reina y el nivel era increíble, hacía muchos años que no veía ese nivel. No sé si habrá tenido que ver el tema del coronavirus en el sentido de que las jugadoras quieren estar más cerca de casa pero se está montando una Liga muy fuerte si nos lo permite la pandemia.

–Salamanca, Girona, Valencia, Gernika, Araski... mucho nivel.

–Incluso Zaragoza, que me ha sorprendido el nuevo proyecto. Creo que va ser una Liga con nueve o diez equipos muy buenos.

–¿El Valencia Basket tiene un equipo para luchar ya por los títulos?

–Lo que veo es que tenemos un equipo con mucho potencial, con jugadoras de un gran nivel y que en otros equipos han hecho cosas importantes. Ahora tenemos que trabajar para llegar a poder ganar títulos. Al final somos un equipo muy nuevo y tenemos que trabajar. Es cierto que si el puzzle encaja bien podemos hacer cosas muy buenas.

–¿El final de temporada perfecto sería jugar una final con la Fonteta llena y semanas después el Eurobasket?

–Me gustaría llegar a lo máximo pero creo que esta temporada el mejor título sería que la gente volviera a disfrutar del baloncesto en los pabellones. Son vasos comunicantes porque si pasa eso es que hemos podido superar la pandemia. He visto por la tele la Fase Final de la ACB y no lo vives igual que con público. Las jugadoras queremos tener a nuestra gente y más en la Fonteta que es un pabellón que se llena. Quiero vivir eso.

–Llega a un club donde la igualdad es una realidad.

–Es real, me he dado cuenta desde el primer día.

–¿El verdadero triunfo llegará cuando se vea como algo normal en un club y no como destacable por anormal?

–Por ejemplo, yo no quise hablar de eso en mi presentación porque en dos semanas me he dado cuenta que en el Valencia Basket es algo real y que por lo tanto hay que darle esa normalidad o naturalidad. Termino de entrenar y tengo los fisios que hagan falta, he llegado a ver a seis metidos en una sala de L’Alqueria. Eso en el extranjero no lo he vivido. Es impensable. Hay detalles que llegan a que si te falta algo en el piso lo tienes a las horas. Cosas que antes no lo he vivido y aquí lo tienen como normal. Hasta el impacto mediático, la presentación que tuve junto a Juskaite no la había tenido nunca.

–¿El día que dejemos de asombrarnos por cosas tan normales se habrá eliminado ese debate de género en el deporte?

–Sí, el día en el que las jugadoras afrontemos una rueda de prensa, entrevista o comodidad dentro de un club como algo normal habrá llegado ese momento. Cuanto antes lo normalicemos lo dejaremos de ver como un tema de desigualdad.

–¿Le molesta que la FIBA vaya a celebrar en septiembre el final de la Champions masculina y cancelara la Euroliga y la Eurocup femenina?

–Tenemos que tener los pies en la tierra y es cierto que el deporte masculino mueve más dinero. Esa es la realidad y no lo podemos cambiar. No me molesta porque además con el tema de la WNBA y los calendarios era más complicado. Claro que me hubiera gustado disputar mi primera Final Four de la Euroliga con el Praga y me he quedado con ganas. Me encantaría que dijeran la juegas mañana pero sé que no va a ser así.

–Vamos, que en esa normalización también entra el dato de que el basket masculino vende más que el femenino.

–Sí. También vende más un pase de modelos femenino que uno masculino. Esa es la realidad del día a día. Entiendo que se van a vender más entradas de un partido masculino que de uno femenino a día de hoy.

–¿El siguiente paso del baloncesto femenino debe ser que cambie la Ley del Deporte para que la Liga sea profesional?

–Llevo muchos años fuera de España pero creo que las jugadoras que han ido regresando están contentas de cómo se están haciendo las cosas. Se creó el Open Day que creo que es una muy buena idea por todo lo que mueve. Ese fue un paso importante y ahora cada vez se están televisando más partidos. Seguro que podemos mejorar pero vamos por buen camino. Lo que espero es que no demos pasos hacia atrás por culpa de los efectos económicos de la pandemia y que se siga creciendo poco a poco. Eso es lo importante.