Reacción de equipo grande del Valencia Basket en Tenerife

El Valencia Basket reaccionó de la dura derrota, por la forma que se produjo, ante el Girona para llevarse un triunfo tras un partido que se embarró. Sin prórrogas, el choque se fue a los 135 minutos de duración y terminó con cuatro antideportivas, una técnica para cada entrenador y Ferrando expulsado por saltar del banquillo en la trifulca que pudo cambiar la suerte del choque. Con los taronja con su máxima renta (57-70), el tercer cuarto terminó con una jugada en la que Doornekamp y Ferrando se enzarzaron. Tras una revisión eterna, los dos jugadores recibieron una antideportiva por golpes mutuos y el base de Benifairó de la Valldigna terminó en la ducha.

Mumbrú, en la sala de prensa, quiso destacar la figura de Puerto: «Me encanta Josep desde que llegué, es un jugador importante que ha tenido un lance en el juego donde los dos vienen agarrándose desde muy atrás. Prefiero jugadores que son capaces de luchar hasta el último segundo que los que se ablandan y se van. Me gusta el carácter de Josep y ha hecho un partido muy serio». El de Almussafes nunca había pasado por algo así en su aún corta carrera. Se convirtió, de repente, en el enemigo de toda La Laguna y tuvo que escuchar, a pocos metros de la grada, de todo. Supo canalizar ese momento de máxima tensión con el aplomo de un veterano. Sin ningún gesto a nadie. Hablando en la pista. Terminó con 16 de valoración. El mejor de su equipo.

Tras la refriega, el Tenerife se acercó hasta el 65-73. Ahí, el Valencia Basket supo controlar ese momento para, de la mano de los puntos de Jones y Davies, volver a subir la renta (70-80) para amarrar un triunfo más importante de lo que supone el 1-1 (es la segunda jornada de la ACB). «En el estreno de la Fonteta, la ansiedad de querer agradar y el nerviosismo nos pasó factura. Nos falta mucho por mejorar, tenemos gente nueva pero no puede ser que si perdemos estamos abajo y si ganamos arriba. Tenemos que ir mejorando cada día. Hemos tenido más el control», analizó Mumbrú a pregunta de este periódico sobre la importancia de la victoria.

«Vamos a jugar peor que Tenerife o Unicaja ahora. Es evidente. Les puedes ganar jugando peor pero vamos a jugar peor. Hay otra parte, que no es negociable, que es la del deseo, la ambición y el querer». Luis Arbalejo lo clavó el martes. Cuando el Valencia Basket encontró un quinteto en pista que entendió esa filosofía, el partido en el Santiago Martín se dio la vuelta como un calcetín. Con 15-10, y la defensa del bloqueo directo central de nuevo haciendo aguas en los de Mumbrú, saltaron a la pista Jovic y Claver. Sin fuegos artificiales. No son jugadores de SuperManager. Subieron el listón físico en defensa, se les unió un inmenso Inglis y, a partir de ahí, comenzó a fluir el juego ofensivo de los valencianos. El parcial hasta el descanso fue de 23-37 (38-47). El primer cuarto volvió a ser un drama defensivo. Si el Girona anotó 27 en ese periodo el Tenerife se fue a 25. Afortunadamente, la intendencia taponó la hemorragia.

En el banquillo, aplaudió esa reacción Semi Ojeleye. El nigeriano se quedó sin debutar porque no acaba de recuperarse de la sobrecarga en la pierna derecha. No conviene arriesgar con un jugador que va a ser clave en la temporada. El sábado, ante el Unicaja en Málaga, se volverá a evaluar su estado físico puesto que en ese partido su perfil sí que puede ser muy necesario. El conjunto malagueño también llegará con un balance de 1-1 puesto que ayer perdió en su visita a Murcia por 100-92. El arranque de temporada está siendo duro para todos.

En el arranque del tercer cuarto, el Valencia Basket volvió a coquetear con un bajón de intensidad que ponía en peligro el partido. Ya ocurrió en el inicio del primer cuarto, con el mismo quinteto. En ese aspecto, aunque terminó mejorando, el trabajo de Jones y del cuerpo técnico tiene que ir creciendo para que el americano no sufra tanto en la defensa del bloqueo directo central. De momento, ante el Girona y el Tenerife ha sufrido mucho en ese aspecto. Tiempo queda para que Reuvers y Touré vayan entrando en dinámica. De momento, su debut en la ACB demuestra que necesitan un tiempo de adaptación. Suena hasta lógico, en un verano de cambio total.

Lenovo Tenerife: Fernández (16), Fitipaldo (7), Abromaitis (1), Cook (11) y Shermadini (21), cinco inicial, Huertas (6), Salin (-), Ristic (5), Sastre (-), Guerra (7) y Doornekamps (12).

Valencia Basket: Jones (10), Robertson (8), Puerto (12), Inglis (6) y Davies (17), cinco inicial, Harper (14), Claver (6), Reuvers (7), Pradilla (2), Jovic (5) y Touré (7).

Parciales: 25-19, 13-28 (38-47), 21-24 (59-71) y 27-23 (86-94).

Árbitros: Aliaga, Martínez y Olivares.

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