El Roig Arena se alza a ritmo vertiginoso

Valencia ya vislumbra su gran creación. El pabellón de referencia. El Roig Arena se alza majestuoso, a un ritmo vertiginoso, para estar listo en 2024. La obra ya se ha adentrado en la última fase, que permitirá acabar una construcción de 280 millones que sufragará íntegramente Juan Roig. En estos momentos son visibles las vías que aguantarán al coloso. La sujeción del pabellón se ha iniciado ya. Un total de ocho grandes estructuras mantendrán firmes lo que está llamado a convertirse en el gran espacio multidimensional de la ciudad. Mientras que gran parte del esqueleto ya está armado, otra gran parte se va creando en un solar cercano para luego insertarse en la obra. Si uno se aproxima al enclave situado en la calle Bomber Ramón Duart, uno enseguida se da cuenta de que tal arquitectura necesita mucho más espacio.

Tan sólo una acera separa la nueva casa del equipo de la Fonteta con las pistas de entrenamiento del club. Los operarios trasladan, gracias a máquinas gigantescas de última tecnología, parte de la cúpula del Roig Arena. Otros tanto ponen a punto los rieles para que serán alzados al punto más alto del edificio. Así mismo, se espera que cuando finalice la fabricación de las ocho vías del nuevo templo del baloncesto valenciano, se tarde un total de 24 días en aupar la raíz del templo taronja. Minuto a minuto, las piezas metálicas finalizadas se van elevando. Llegar a la cúspide es una odisea, cada una tarda aproximadamente tres días en alcanzar las alturas en subir ese Burj Khalifa valenciano.

Las temperaturas en estos días no acompañan, los termómetros llegan alcanzar hasta los 33 grados. Los más de 300 obreros del Roig Arena trabajan sin descanso para finalizar las obras. Los medidores siguen subiendo, pero los centenares de profesionales continúan con una labor sólo para los más valientes. Los camiones con toneladas de cemento acaparan esa avenida del colesterol donde tantos runners de la ciudad frecuentan. El porqué es muy sencillo, el tercer anillo de la estructura está ya iniciándose. Un grupo de obreros trepa como si fuera una montaña para finalizar ese tan ansiado último anillo de Roig Arena. A su vez, las cuatro torres del pabellón siguen su curso. Algunas más rápidas que otras, eso sí, sin pausa.

Comienza la tercera fase

El pasado mes de mayo se aprobó la última licencia que faltaba para finalizar el recinto multiusos. Con ella ya se ha iniciado la fase tres de ejecución de las obras. Eso significa que tras finalizar este último periodo, comienza el arreón final para concluir el recinto. Esta licencia incluye los acabados interiores de todo el recinto, así como la licencia definitiva de funcionamiento.

Las construcciones avanzan con buen ritmo. Es por ello que parte de los asientos que estarán situados en pista ya se dejan ver desde las alturas de los edificios próximos al Roig Arena. Además, las diferentes gradas del primer y segundo anillo han iniciado su levantamiento. Como si fuera una carrera de 100 metros lisos, algunas localidades de la segunda planta ya están montadas. La previsión es que se concluyan las obras a finales de 2024.

La nueva mansión de la ciudad del Turia contará, además, con dos aparcamientos. El primero de ellos se situará en las cercanías de la Fuente de San Luis. El recinto contará con 1.000 plazas en cuatro alturas. Por su parte, el segundo será al aire libre y será más próximo al pabellón valenciano. Los dos sumarán un total de 1.200 plazas de aparcamiento. Estos dos estacionamientos pretenden dinamizar el barrio de Na Robella, el lugar donde se sitúa el hogar taronja, próximo a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, una zona donde, por cierto, cada vez es más complejo aparcar.

El Roig Arena será el recinto cubierto multiusos de referencia nacional e internacional que tendrá la capital del río Turia. En él se celebrarán, aparte de los partidos masculinos y femenino del Valencia Basket, eventos de entretenimiento como conciertos. A estas actividades habrá que añadirles las corporativas. Todo ello para posicionar a la ciudad aún más internacionalmente. El proyecto cuenta con un presupuesto de más de 280 millones de euros. Esta cantidad de dinero está sufragada íntegramente por Juan Roig mediante su patrimonio personal.

El recinto tendrá una capacidad máxima estimada de 15.600 espectadores cuando albergue partidos de baloncesto. Para otras actividades se espera ampliar hasta los 18.600 espectadores. Asimismo, incluirá 2.000 asientos en la sala multifuncional que acogerá eventos en paralelo.

A la construcción del recinto y de los aparcamientos, que ya se encuentran en su última fase, hay que incorporar también un parque público con zonas verdes. Un total de 20.000 metros cuadrados se convertirán en el pulmón del área. También se prevé que surjan nuevas zonas de restauración con una amplia oferta de localidades, terrazas y zonas prémium que accederán entre otros al catering del chef valenciano Miguel Martí. A todo esto hay que incorporar el colegio ya en funcionamiento.

En los últimos días, Licampa 1617 ha inaugurado una nueva página web donde el propio fundador de Mercadona ha afirmado que es un orgullo la construcción de este pabellón. La inversión dotará a la ciudad de un recinto de referencia internacional que dinamite el mercado del entretenimiento, ha asegurado.

A su vez, la propia compañía ha difundido en sus redes sociales un vídeo donde diferentes usuarios pueden hacer un seguimiento por los entresijos de la arquitectura, la cual se convertirá en una realidad en solo un año, aunque su apertura será en el primer semestre de 2025. Una vez se entreguen las llaves tras finalizar las obras, el recinto necesitará unos tres meses para actualizar todos los sistemas y que esté operativo. Ya son muchos los eventos que esperan. Uno de ellos puede ser un partido de la NBA. El vicepresidente de operaciones de la NBA en Europa y Medio Oriente, Neal Meyer, así lo dijo en una reciente visita a la ciudad. «He visto las obras del Roig Arena y también las figuraciones de cómo va a quedar la instalación cuando esté construida. Va a ser un Arena imponente. Lo que puedo decir es que la NBA siempre estudia y evalúa nuevas oportunidades para organizar partidos para los aficionados de todo el mundo y abrir las puertas a esas nuevas oportunidades», dijo.

El pabellón se edifica sobre suelo público por una concesión municipal por 50 años –revertirá a la ciudad tras ese tiempo– y contribuirá a generar aproximadamente 300 puestos de trabajo (directos e indirectos).

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