¡Supercampeonas por partida doble!

Algo tienen las Islas Canarias con la Supercopa que son un talismán para el Valencia Basket. El equipo taronja conquistó en Las Palmas la segunda de su equipo femenino, la primera fue en La Laguna en 2021, en un trofeo que se unirá al ganado por el equipo masculino en 2017. Lo hicieron también en el Gran Canaria Arena. Esa magia de la tierra del mojo estará siempre impregnada en el título con el que arrancan las temporadas. Las valencianas supieron sufrir para recuperar el trono que conquistaron hace dos años, también contra el Avenida y que perdieron en 2022 frente al Girona. Lo hicieron, además, templando la ansiedad aunque nadie podía pensar que eso iba a ocurrir cuando se habían disputado dos cuartos y medio.

Con 5:37 por disputarse del tercer cuarto, el marcador reflejaba un 54-27. La máxima renta taronja en un momento en el que parecía imposible la remontada de las de Salamanca. Nunca hay que subestimar el corazón de unas campeonas y mucho más cuando la capitana de ese equipo se llama Silvia Domínguez. A falta de 15 segundos para el final del partido el resultado era 76-73 y balón para el Avenida. El parcial de 22-46 se quedó en un tremendo susto gracias a una mano providencial de Ouviña, que le robó el balón a Domínguez para comenzar a atar la victoria. Los tiros libres de Buenavida, una canaria, sentenciaron el título. El quinto de la historia en el Valencia Basket para su equipo femenino y el que convertirá en una docena las banderas que estén colgadas en el techo de la Fonteta. Ese es el legado para los que tengan que venir.

El único respiro en la primera parte para el Avenida fue el 0-2. Desde ahí, el Valencia Basket comenzó a calentar motores con un parcial de 12-0 cerrado con una canasta de fantasía –rectificado en el aire de lado– de Alba Torrens (12-2) para seguir creciendo de la defensa y sacar de la pista al conjunto charro. No bajó el pistón el equipo taronja, sabedor de que cuando se presenta la oportunidad de romper un partido hay que aprovecharla, y siguió apretando las clavijas en defensa para ir sumando nuevas máximas rentas (18-2 y 24-7). Si al descanso el marcador no era más escandaloso, aún, fue por dos arreones de orgullo de Silvia Domínguez. La eterna capitana de Salamanca. El primero, con un parcial de 0-5, cerró el parcial de inicio en un 24-12 y el segundo, con un triple lejano al límite del descanso, subió el 42-22 al descanso. Visto lo visto, esa fue la mejor noticia para las de Pepe Vázquez.

Ese análisis cobró importancia cuando el Avenida empezó a remontar el partido. Es cierto que el Valencia Basket deberá analizar los errores que le llevaron al borde del ataque de nervios en el último cuarto pero también, teniendo en cuenta que la temporada acaba de comenzar y que aún falta la llegada de Rebecca Allen, el nivel de baloncesto mostrado en la primera parte, en los dos lados de la pista, invitan a soñar con una gran temporada.

Una vez pasado el susto, la capitana Casas cumplió con el ritual de levantar la Copa. Ese momento mágico siempre queda en la retina de las más jóvenes. La sonrisa de Alicia Flórez, consiguiendo su primer título como profesional a los 19 años, al cortar una de las redes de las canastas y abrazarse segundos después con una leyenda como Alba Torrens, es una postal eterna. Tras ascender en 2018, conviene no olvidar la fecha, el Valencia Basket ya lleva una media de título por año. Tremendo.

Valencia Basket: Romero (7), Casas (11), Torrens (14), Hempe (2) y Carrera (10) –cinco inicial– Fingall (4), Ouviña (14), Buenavida (4), Fam (-), Florez (-), Gülich (12) y Contell (-).

Perfumerías Avenida: Çakir Turgut (4), Delaere (3), Hartley (3), Gil (12) y Fasoula (19) –cinco inicial- Kone (-), Rodríguez Manso (8), Domínguez (14), Vilaró (8) y Prince (2).

Parciales: 24-12, 18-10 (42-22), 22-24 (64-46) y 14-27 (78-73).

Árbitros: Carlos Javier García León, Francisco José Zafra y Cristina Adán Rodríguez.

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