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Hace justo diez años, el Valencia Basket aceptó poner bajo su manto a los equipos de formación del extinto Ros Casares que vivían una situación ... límite en el pabellón de La Malvarrosa. Una década después de aquel movimiento clave, donde Manolo Real tuvo mucho que ver, el equipo femenino taronja está tan asentado en la elite que busca en Huelva el único título nacional que se le resiste, tras los dos entorchados en la Supercopa y el de la Liga Femenina, del que es el actual campeón. Las de Rubén Burgos debutaron en la Copa de la Reina en 2019 y disputaron la final en 2021. Tras caer en las semifinales hace un año en Zaragoza, este jueves ante el Ibaeta (18.30 horas, À Punt) buscarán su quinta semifinal.
La expedición taronja viajó este miércoles a Huelva, hasta Sevilla en avión y en autobús el resto del trayecto, en una convocatoria donde Rubén Burgos tendrá la plantilla al completo. Ouviña, que se perdió el último partido liguero por un problema médico, ya está totalmente recuperada mientras que Gülich, que continúa trabajando a un ritmo dosificado por las molestias musculares que está arrastrando en las últimas semanas, estará disponible pero el dolor determinará los minutos que puede tener en el torneo. Elena Buenavida y Awa Fam, recordemos que aún está en categoría junior, completan el roster para disputar una competición que tendrá a 150 valencianos en las gradas. Teniendo en cuenta la distancia y las fechas, con la resaca fallera aún presente, es un dato muy destacable.
De toda la plantilla valenciana, la única que sabe lo que es ganar una Copa es Queralt Casas. Un dato curioso teniendo en cuenta que está Alba Torrens, una de las jugadoras con más participaciones en el torneo pero que nunca lo ha ganado. En cuanto a las debutantes, las taronja tienen a toda una MVP de la Euroliga que se estrena. Alina Iagupova no escondió su ambición antes de viajar a tierras onubenses: «Tengo muchas ganas de jugar esta Copa, me siento bien, porque es nuevo para mí en mi carrera». Rubén Burgos optó por la prudencia en la previa, sabiendo que el torneo que se disputa en el Palacio de los Deportes Carolina Marín está más abierto que lo que puede marcar la clasificación liguera, con todos los favoritos lastrados por el cansancio de las competiciones europeas disputadas: «Llegamos muy ilusionadas y preparadas. Es uno de los objetivos del club, de la afición, del equipo, disputar el mejor torneo posible, y con la mentalidad de enfocarnos en hacer las cosas bien. Sabemos que la exigencia es máxima. El primer reto es IDK, que es un equipo que ha ido a más durante la competición, con una plantilla muy compensada. Somos conscientes de la exigencia e intentaremos demostrar nuestra mejor versión».
Los precedentes entre los dos rivales que abrirán los cuartos de final de la Copa son rotundos, un inmaculado 12-0 para las valencianas. El único precedente copero también fue en los cuartos de final (74-58), en la edición donde las de la Fonteta llegaron a la final. Toda la expedición firmaría repetir, si el partido decisivo termina lógicamente en triunfo. En 2021, el título se lo llevó el Girona. En los partidos de esta temporada, el Valencia Basket ganó en casa 72-47 mientras que en la segunda vuelta el encuentro de San Sebastián fue mucho más disputado (63-70).
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