Emotivo adiós de la familia del Valencia Basket a Pablo Martínez

No todas las personas consiguen que su funeral se convierta en un homenaje para honrar el recuerdo de una persona que haya sido transversal en una entidad en las últimas tres décadas. Para que eso ocurra, has tenido que ser muy especial. Y esa palabra, especial, es la que mejor define a Pablo Martínez Ramírez. El histórico fisioterapeuta que trabajó durante 23 temporadas en el Valencia Basket y que falleció este lunes a los 53 años. Este viernes, jugadores, entrenadores, compañeros del apartado físico y médico del club y empleados de la entidad, de todas las épocas, despidieron al que fuera su amigo y arropado a su pareja, Rebeca, a sus cuatro hijos (Pau, Marc, Leo y Bruno) y al resto de familiares.

Entre recuerdos, y mucha emoción, brotó una definición que todos los presentes admitieron como propia. Pablo Martínez fue un adelantado en el tiempo. Hoy en día, se le llamaría influencer. «Si te decía algo, lo hacías sin pensar», recordó uno de los jugadores que pasaron por sus manos. Revolucionario a finales de la década de los 90, tanto en la preparación física como en la recuperación de lesiones, el valenciano se fue labrando una carrera y reputación hasta convertirse en un referente para el mundo de la fisioterapia en la Comunitat. Bien lo saben sus alumnos y sus compañeros de área en el Valencia Basket. Como Pedro Cotolí, Jordan Sospedra, Joan Mahiques, Josep Banítez, Julio Galcerán, Josep Galán, Pau Alcácer, Adrián Valverde, Manu Capdevila, Julia Cerrillo... todos ellos se unieron en el dolor, el recuerdo y el homenaje al que fue un pionero. Junto a ellos, Ignacio Muñoz (jefe de los servicios médicos del Valencia Basket y director de IMSKE, donde trabaja Pablo) o el doctor Álvaro Sala.

Es muy complicado reunir a jugadores de distintas épocas y más cuando muchos de ellos no coincidieron en el parquet. Lo que les une a todos es el recuerdo de Pablo Martínez. Bojan Dubljevic, Flo Pietrus, José Luis Maluenda, José Simeón, Alfons Albert, César Alonso.... se unieron a las tres leyendas que tienen su camiseta retirada en el Valencia Basket; Nacho Rodilla, Víctor Luengo y Rafa Martínez. ¡Menudo equipo sale ahí! Todos ellos pasaron por las expertas manos de Pablo para curar dolencias. Contribuyeron al homenaje entrenadores como Ibon Navarro, Fernando Jiménez o Nestor Mataix, directores deportivos como Toni Muedra, directores generales, como el actual Enric Carbonell o José Puentes, el presidente Vicente Solá y Alfonso Castilla, el histórico delegado del equipo y que además de una gran amistad comparte con Pablo Martínez el orgullo de haber trabajado en los equipos que han ganado todos los títulos masculinos de la historia del club, desde la Copa del Rey de 1998 a la Eurocup de 2019. Paco Plaza, Virginia, Juanjo Rojo... decenas de compañeros de club y amigos quisieron decirle un último adiós.

«Desde que llegara como fisioterapeuta de la plantilla profesional en 1993, Pablo Martínez desarrolló fundamentalmente su trayectoria al cuidado de los jugadores del Valencia Basket durante dos etapas, con la segunda de ellas terminada en 2022», valoró la entidad en un comunicado el pasado lunes, que destacó el amor que le profesaron todas las plantillas con las que trabajó: «Además del cariño y el respeto de todos los jugadores que pasaron por sus manos, de sus compañeros de staff y del resto de empleados del club, Pablo lucía con orgullo la condición de haber formado parte del cuerpo técnico en todos los títulos obtenidos por el primer equipo taronja. En recuerdo a su memoria, se guardará un minuto de silencio en el próximo partido que el primer equipo masculino del Valencia Basket dispute en la Fonteta. El club quiere enviar a su familia mucho ánimo y fuerza en estos momentos tan complicados y desea trasladarles todo nuestro apoyo ante esta irreparable pérdida».

Ya desde el momento en el que se conoció su fallecimiento, los que fueran sus compañeros de club, en las diferentes etapas, fueron mostrando su recuerdo y afecto a través de las redes sociales. Joan Mahiques, fisio de la entidad taronja con el que trabajó Pablo Martínez en la etapa de la conquista de la Eurocup de 2010, fue de los primeros: «Vuela alto compañero, gracias por los cuatro años compartidos en el Valencia Basket, por tu amistad, por tu generosidad y por tus grandes enseñanzas. Un abrazo allá donde estés Pablo». Víctor Luengo, el eterno capitán del Pamesa Valencia, de los más sentidos: «Rotos en el corazón y alma. Un amigo, una gran persona y un increíble profesional. Te echaré de menos Pablo». Rafa Martínez, Diot, De Colo, Claver, San Emeterio, Pietrus, Pleiss, Montecchia, Maluenda, Berni Álvarez, Lucic, Pradilla, Abia, Guardia, Justin Hamilton, Paraíso... jugadores de distintas generaciones, junto a entrenadores como Pedro Martínez con el que compartió aquella histórica Liga o Paco Olmos con el primer título continental, pero unidos en el dolor por una pérdida que deja un profundo dolor dentro de la Fonteta. Pablo Martínez es historia, en mayúsculas, del Valencia Basket. Como el doctor Jorge Mora, el maestro Miki Vukovic o Martín Labarta. Cuatro protagonistas de aquella mítica Copa del Rey del Pamesa de 1998 en Valladolid que ya son eternos.

Ahora que tras el verano la Fonteta encara su último baile, será buen momento de recordar a todas las personas de la familia taronja que nos han dejando. El recuerdo eterno de personas que, desde la grada o su trabajo en el club, contribuyeron a que el corazón del Valencia Basket lata desde 1986; Ángel Fonfría, Pipo Arnau, Lluis Muñoz, Jorge Bauset, JuanMa Pérez, Rosa Laserna, Javier Pérez Palomo, David Amorós, Roberto Soler, Jaime 'Marcioulonis', Tommy Capitani, Loren Lopera, Antonio Pérez, Félix Matute, Pedro Vidallach, Dani Arocas, Vicente Albert, Kike Vázquez... todos ellos forman parte de la historia del Valencia Basket. De la familia eterna de la Fonteta.

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