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José Puentes, director general del Valencia Basket, anunció en una entrevista en Radio Intereconomía Valencia, que han entregado un proyecto en la Generalitat para agilizar la entrada de espectadores en la Fonteta en los partidos de la Euroliga y la Liga Femenina, puesto que en la ACB es potestad del Consejo Superior de Deportes.
- ¿Es sostenible actuar con tres protocolos distintos con respecto a la presencia de aficionados según se dispute un partido de la ACB, la Euroliga o la Liga Femenina?
- No es algo sostenible porque ya no son los protocolos sino cómo estamos tratando a nuestros aficionados, a una pieza fundamental de esta obra de teatro que es el baloncesto donde tienes unos actores en la pista y que luego tienes unos espectadores que viven con mucha pasión el deporte. Es incomprensible que tengamos unas competiciones con público y otras sin público. Es difícil de explicar pero todo parte de una Ley del Deporte de 1990 que es las que establece que hay tres ligas profesionales que son la Primera y Segunda de fútbol y la ACB. El resto, en nuestro caso el baloncesto femenino, no están catalogadas como ligas profesionales aunque la relación que tenemos con las jugadoras sí que lo es puesto que es contractual. En esas tres competiciones es el CSD el que tiene que dictar en este caso la presencia de público.
- En la Liga Femenina o la Euroliga, que no dependen de esa Ley del Deporte, se puede abrir la Fonteta al público en las condiciones que marque la autoridad sanitaria. En este caso la Conselleria de Salut Pública.
- Sí. En estos momentos la Generalitat permite la presencia de hasta 400 personas en recintos culturales y luego ya es cada club el que decide. Nosotros, por supuesto que queremos. Igual que en su momento creamos el concepto burbuja y organizamos la Fase Final de Valencia también hemos trabajo un proyecto para poder traer a más personas. Tenemos que ayudar a la Administración y no al revés, no esperar que sean siempre ellos los que nos digan lo que hay que hacer.
- ¿Han presentado un proyecto a la Generalitat por tanto para que a la Fonteta accedan más espectadores que los reglados por esa norma para la Euroliga y la Liga Femenina?
- Tenemos un proyecto ya pintado desde hace más de un mes. Está tratado y hablado pero por las circunstancias de la pandemia y los datos que teníamos en Valencia hasta hace unas semanas no era posible. Tenemos que adaptar el deporte a la situación sanitaria y no al revés. Si hubiéramos tenido la visión de adaptar la situación al deporte no hubiéramos tenido la burbuja sanitaria para la Fase Final. Tener L'Alqueria fue la clave pero también lo fue reducir los desplazamientos a hospitales porque estaban llenos y eran un riesgo de contagio construyendo un hospital dentro de L'Alqueria. El CSD vio el proyecto cuando se presentó a la ACB y vio que estaba muy atado. Por eso se aprobó y ha funcionado.
- La presidenta del CSD, Irene Lozano, anunció hace unos días que la Liga de Fútbol femenina será profesional a partir de la próxima temporada. Se olvidó del baloncesto, un deporte colectivo con más arraigo histórico como demuestran las medallas a nivel de selección y con más fichas federativas.
- El baloncesto es la disciplina deportiva femenina que más alegrías le ha dado a España y probablemente con la que nuestros políticos se hayan sacado más fotos. El baloncesto femenino es el que más licencias tiene de este país pero me da la sensación de que les es más fácil catalogar de profesional el fútbol porque la mayoría de los clubes son SAD y les sea más fácil para meterlos en la Ley del Deporte de 1990 aunque en el fútbol masculino hay cuatro clubes que no lo son. Me da la sensación de que les es más fácil empezar por ahí, tendrá sus repercusiones mediáticas.
- ¿Antes de final de 2020 tendremos público en los partidos de la ACB?
- El tema de que haya público va a ser una responsabilidad de todos los ciudadanos y de que las cifras vayan bajando. La temporada va a ser complicada y va a haber mucha incertidumbre. Por eso no hemos sacado a la venta abonos en el Valencia Basket. Puede que cada vez haya un poco más de público en función de las cifras y de que los clubes, y las Ligas, presentemos propuestas a las administraciones con sentido común y no basándonos en porcentajes. Los aforos hay que construirlos teniendo en cuenta las distancias físicas, de dos metros, y los accesos. A la administración le preocupa cómo llega la gente a los recintos y qué va a hacer cuando acabe el evento.
- La Euroliga tiene un plan diseñado por si hay que recurrir durante la temporada a las burbujas. ¿Valencia está preparada para ser una solución a la Euroliga si eso llega?
- Nosotros siempre estamos preparados, lo demostramos en el día a día. En función de cómo esté la epidemia en cada país habrá ciudades que nos podamos convertir en burbuja pero puedes montar una burbuja en una ciudad muy contaminada. No habría ningún problema si realmente generas una burbuja como tal, no 'pseudoburbujas'. En su momento, en la Fase Final, algún club lo utilizó de forma maligna.
- ¿Quien?
- Se dice el pecado pero no el pecador.
- Volviendo a la Ley del Deporte de 1990. ¿Es hora de cambiarla?
- Nosotros hemos hecho la apuesta por hacer un baloncesto global en el Valencia Basket, no uno masculino o femenino. Te tienes que actualizar, la sociedad evoluciona y si tú no evolucionas acabas yendo hacia atrás. Son leyes que en su momento fueron muy buenas y que ahora a la Ley del Deporte toca hacerle un cambio, actualizarla, porque la sociedad ha avanzado.
- ¿El objetivo del Valencia Basket en la Euroliga es el Top 8?
- Sí, así es. La Euroliga modificó el sistema de competición y permitir ascensos y descensos. Ahora hay una vía deportiva abierta que se ha trabajado entre todos. Hay una opción deportiva que no podemos perderla y tenemos que luchar. El mecenas Juan Roig ha hecho un esfuerzo, nos ha dado unos grandes ingredientes. Tenemos una gran plantilla, ellos lo saben, y ahora hay que hacer un equipo. Crear esa química.
- ¿El del Valencia Basket femenino es el de luchar ya por los títulos?
- En la Supercopa pinchamos. Tenemos que tener los pies en el suelo. Las jugadoras y los entrenadores van a trabajar duro pero en el deporte dos más dos siempre no son cuatro. Tenemos hambre y el primero que la tiene es el entrenador, Rubén Burgos, como también la tiene Jaume Ponsarnau.
- La FIBA está terminado su máxima competición masculina de la temporada 2019-2020, la Champions, y dejó desierta las femeninas, entre ellas la Eurocup que estaba disputando el Valencia Basket. Suena a igualdad de boquilla.
- Siendo justos, la FIBA nos consultó a todos los clubes que estábamos en el Top 8 y muchos clubes dijeron que no querían jugar. El Valencia Basket dijo que sí y se tomó la decisión. Se intentó pero hubo clubes que no quisieron.
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