Desde que fue eliminado de la Euroliga, el Valencia Basket está afrontando el final de la Liga Endesa como una especie de penitencia, ganada a pulso por su irregularidad, pero en la que debe certificar su pase al playoff de la Liga Endesa, como octavo si no hay descalabro final del Gran Canaria, para luchar en los cuartos de final con toda la gasolina que quede en el depósito. Ante el Obradoiro sacó la tercera victoria seguida en la Fonteta, como ante el Betis y el Bilbao, sin mucho brillo pero con un buen trabajo colectivo. Tras el 46-45 al descanso, de nuevo con el rival en proyección de superar los 90 puntos, la mejora del nivel defensivo en la segunda parte (el Obradoiro anotó 22 puntos en los primeros 16 minutos de la segunda parte) fue suficiente para subir el 16-14 en su balance de la ACB, a falta de cuatro jornadas para el final de la Liga Regular.
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En una victoria coral, Dubljevic volvió a firmar un partido muy serio (18 puntos, 9 rebotes y 28 de valoración) y la defensa taronja supo tapar a tiempo las lagunas en la parte interior que en las últimas derrotas en la ACB, fuera de casa, habían lastrado en derrotas a los de Mumbrú. Con la baja por lesión de Rivero, la rotación valenciana se quedó en once puesto que Bressan disputó sólo segundos residuales.
Desde el inicio del primer cuarto, el Obradoiro intentó hacer daño con el tiro exterior para acabar ganando 23-24 el parcial y dejar claro que se tenía que mejorar la defensa de las líneas de pase, con un equipo que hizo mucho daño desde el tiro desde las esquinas, y ese peligro siguió latente con el 38-40 ya avanzado el segundo cuarto. Tras el descanso, llegó el cambio de mentalidad en el juego que ponderó Mumbrú tras la victoria: «En la primera parte estuvimos poco intensos con la pelota y en la segunda me gustó el equipo mucho más, me gusta más cuando estamos agresivos que cuando especulamos. Hemos tenido una semana dura y larga de trabajo. Queremos recuperar jugadores, tenemos cinco bajas aunque parezca que no. Hay veces que tenemos que jugar muchos minutos con gente pequeña, con dos bases, y ahora sólo trabajamos en el futuro inmediato. Hay cosas que perdimos en el último tramo de competición que tenemos que ir recuperando». Esa mejora defensiva se trasladó al tercer cuarto (66-60) y al arranque del último 77-67 y aunque el Valencia Basket sufrió un poco más de la cuenta en los últimos minutos amarró el triunfo.
Valencia Basket: Hermannsson (7), Harper (9), Webb III (7), Claver (8) y Dubljevic (18) -cinco titular- Puerto (-), Pradilla (6), Jones (14), Evans (5), Alexander (6), Radebaugh (7) y Bressan (-).
Obradoiro: Westermann (5), Robertson (20), Scrubb (9), Vicedo (10) y Guerrero (12), -cinco titular- Zurbriggen (2), Blazevic (1), P. Scrubb (2), Muñoz (6) y Suárez (11).
Parciales: 23-24, 23-21 (46-45), 20-13 (66-58) y 21-18 (87-78).
Árbitros: Pérez Pizarro, Joaquín García y Héctor Báez.
Incidencias: 4.486 espectadores.
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