Willy Hernangómez se deja querer por el Valencia Basket

L'Alqueria del Basket ha vivido este sábado los partidos decisivos de las Europe Finals 2023 de la Junior NBA, una competición que se disputará en Valencia al menos hasta 2025 y que debe ser la primera semilla para el sueño que es tener un partido oficial en el Roig Arena, con el triunfo de Israel en categoría masculina y de la República Checa en la femenina. Los dos equipos de España, representados por el Valencia Basket, han conquistado la medalla de plata. Willy Hernangómez y Amaya Valdemoro han ejercido de embajadores del torneo y el actual MVP del Eurobasket, en su primera visita a L'Alqueria, se ha mostrado encantado con la instalación, además de lanzar un guiño al conjunto taronja. También se ha mostrado taxativo con respecto a los episodios de racismo que se han vivido en las últimas semanas en el deporte español e incluso le ha lanzado algún consejo a su actual compañero en los Pelicans, Zion Williamson.

-Hemos vivido un episodio racista en el mundo del baloncesto con los insultos a Nnaji en Madrid en la llegada del Barcelona al WiZink Center. ¿Un buen mensaje sería que en la lucha contra el racismo no hay camisetas?

-Me entristece ver que en la actualidad hay personas que no respetan. No tiene que existir el racismo no sólo en el deporte sino en cualquier momento o parte de la vida. El respeto entre todos nosotros, entre iguales, siempre tiene que estar y más con los deportistas, que hacen algo que les gusta. Nunca hay que faltar el respeto y menos por algo racista. El racismo es intolerable y hay que castigarlo, igual que vimos lo de Vinícius que los que lo hicieron no van a volver a entrar en un campo fútbol, que ahora pase lo mismo y no vuelvan a entrar a un pabellón a un partido de baloncesto porque los jugadores no queremos a nadie que nos anime que sean racistas.

-¿Qué trabajo está haciendo en verano?

-Como cada verano trato de mejorar, hacerme mejor jugador Este año estoy centrado en mejorar el tiro, para que cada vez se vea más. Ser más polivalente e intentar aportar más cosas en la pista. Está siendo un verano más largo porque no pudimos meternos en el playoff con los Pelicans y ahora estoy centrado en el trabajo con la selección que comenzará en un mes.

-Es inevitable fijarse en la ilusión que siempre tienen los jugadores y jugadoras jóvenes cuando tienen la oportunidad de tener contacto con una estrella profesional en estos torneos. ¿Qué les dice cuando tiene oportunidad de charlar con ellos?

-Lo que siempre me preguntan son consejos y les digo que haber estado en sus zapatillas, el haber disfrutado y tenido ídolos que me han dado consejos como Felipe Reyes o Pau Gasol, les transmito lo mismo que ellos. El baloncesto es un deporte precioso, que amo. Me encanta levantarme todos los días y pensar que voy a jugar a baloncesto. Hay que disfrutarlo, tener mucha paciencia y disfrutarlo mucho. Trabajar y no desesperarte porque los resultados no salen de un día para otro. Lo bonito de este deporte es que cuando piensas que las cosas no salen, sigues entrenando para hacerlo mejor y al final llega el éxito. La paciencia, la disciplina y el sacrificio son tres adjetivos para ser feliz en el baloncesto.

-España afronta el Mundial como vigente campeón del mundo y del Eurobasket. Va a ser complicado esta vez la carta del tapado.

-No hay que tener miedo ni temor a ninguna selección ni tampoco nos tenemos que poner presión por ser campeones del Mundo y del Eurobasket. Creo que tenemos que estar con la mentalidad que tuvimos el verano pasado, que es la de pasarlo bien, disfrutar y competir contra el rival que sea. Una cosa muy buena que hicimos es que competíamos en los entrenamientos a tope. Daba igual que fuese tiro o un partido. Eso nos ayudó a estar preparados siempre. Luego la competición nos dirá si somos campeones o no. Las ganas de dejarnos la piel para clasificarnos para los Juegos de París 2024 es el objetivo.

-Cuando visitó Valencia su hermano Juancho, para la presentación del Junior NBA, le recordamos que estuvo a un paso de firmar por el Valencia Basket antes de irse a Estados Unidos.

-Sí, fue así.

-¿Le aconseja que ahora puede ser un buen momento, con el Roig Arena en construcción?

-Le aconsejo a él y me aconsejo a mí (se ríe con ganas). Valencia, no sólo por la ciudad que es increíble por su gente, el clima y la comida, el proyecto que tiene como club el Valencia Basket es súper interesante. Viendo las instalaciones de L'Alqueria del Basket, que no las conocía, apetece quedarse aquí a entrenar y pasarse unos cuantos días. El Valencia Basket es uno de los grandes de la liga española y a cualquier jugador le gustaría jugar aquí.

-¿El Valencia Basket, más allá de los resultados deportivos, ha conseguido que sea un proyecto apetecible?

-Es un club que a cualquier jugador no es que le apetecería sino que le encantaría poder venir al Valencia Basket a jugar. Es cierto que en los últimos años no les están saliendo los resultados pero es cuestión de paciencia y de confiar en el proyecto que tienen. Les animo, les apoyo y ojalá les vaya muy bien porque además lo que están ayudando con el trabajo de cantera, que tantos niños y niñas aprendan a jugar al baloncesto, eso luego va a ir para arriba y seguro que ayuda al primer equipo.

-¿Cómo está su situación actual en los Pelicans?

-En febrero intenté salir para buscar una mejor opción para jugar y tener minutos ya que no veía que los iba a tener en los Pelicans. Decidieron retenerme y ahora vienen días movidos, con mucho cambio. El 29 de junio tienen que decidir si ejercen mi opción de contrato o no. Lo que quiero es jugar, no quiero tener otro año así. Mi único motivo de estar en la mejor liga del mundo es poder competir con los mejores. Creo que encontraremos la mejor solución, tanto para ellos como para mí.

-Ahora comienza la era de Wembanyama en la NBA.

-Estoy muy ilusionado por ver cómo se puede adaptar a una liga que es muy dura. Me gustaría que me sorprendiese y que se adaptara rápido pero es una liga muy física y se ha visto en Francia que cuando ha jugado contra equipos físicos le cuesta. Es un talento generacional y puede marcar una época en el baloncesto.

-¿Cómo ha vivido desde dentro la actual situación complicada de su compañero Zion Williamson?

-Se le ha juntado un poco de todo. Es muy chaval, es muy buen chico. Es muy joven y cuando tienes tanta presión mediática en la NBA, no sólo de los medios de comunicación sino de tu familia o de la gente que te rodea, puede no llegar a ser un buen camino para un jugador tan joven. Ha empezado a rodearse de gente que le va a aportar y sumar y espero que salga adelante, cambie y demuestre el potencial de jugador que tiene. Le he visto en los entrenamientos y espero que tenga una buena temporada. Cuando tienes 19 o 20 años eres una esponja, aprendes de todo lo que te rodea y no ha estado bien rodeado y aconsejado. Es mejor darse cuenta tarde que no darse cuenta. Su talento y portento físico lo hemos visto y saldrá adelante.

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