Las tiendas del entorno de Ikea incrementarán sus ventas hasta un 8,5%

Las ventas de los comercios minoristas del entorno de Ikea podrían incrementar sus ventas hasta un 8,5% al año gracias a un incremento de las visitas al lugar de 8,7%. Esto es, al menos, lo que estima el estudio de Impacto Económico, Social y Medioambiental de la tienda de Alfafar realizado por el departamento de Comercialización e Investigación de Mercados de la Facultad de Economía de la Universitat de València, dirigido por el catedrático del departamento Alejandro Mollá.

Así lo ha anunciado esta mañana el profesor Mollá en la presentación de la tienda a los medios de comunicación. Del documento también se desprende que las instalaciones, que abrirán sus puertas el próximo martes 17 de junio, recibirán una media anual de 2,4 millones de visitantes, de los cuales el 6,7% podría provenir de provincias de fuera de la Comunitat como Teruel, Cuenca, Albacete o Tarragona.

Entre los datos significativos del informe también destaca que Ikea Alfafar permitirá recuperar más de la mitad de los 40 millones que cada año se gastan los valencianos actualmente en tiendas de Ikea de fuera de de la región. No obstante, 17 millones de euros en compras se seguirán invirtiendo en las sedes ubicadas en otras autonomías, mayoritariamente en Murcia.

En el ámbito local, según el estudio, la construcción de la tienda aportó en 2013 el 14% de todos los ingresos del Ayuntamiento de Alfafar y hasta el 80% de lo recaudado a través del Impuesto sobre Construcción Instalaciones y Obras (ICIO). Por lo que respecta al trabajo, se estima que la tienda ha supuesto la reducción del desempleo en el comercio de l'Horta Sud en un 3,7% y un 3,3% en Alfafar.

Guiños a Valencia

Cifras al margen, la tienda de Ikea se caracteriza por multitud de motivos valencianos que hoy, por primera vez, han sido contemplados por personal ajeno a la tienda. La habitación que recibe a los asistentes cuenta con un mueble del que cuelga un traje completo de fallera. «Hemos querido representar cómo podría ser la habitación de una valenciana», indicaba la directora de la tienda, Carolina García.

La realidad regional, y por extensión, la española, también queda patente en los paisajes de la huerta serigrafiados en la sección de mobiliario exterior, e incluso en algunos muebles pensados para las nuevas realidades generadas por la crisis. «Aquí tenéis un armario para el salón, pensado para los hijos que tienen que volver a casa de sus padres», explicaba García.

Tampoco falta en la tienda el obligatorio homenaje a la paella valenciana en la sección de artículos para la cocina, ni el que recibe la diseñadora de la Comunitat Inma Bermúdez, cuyo trabajo para la firma sueca en la creación de lámparas y artículos de baño está puesta en valor en el establecimiento.

A nivel organizativo, Ikea Alfafar se diferencia de otras tiendas por el mayor número de artículos de terraza, que estarán expuestos todo el año; y por un innovador sistema para la exposición de cortinas que simula la iluminación de la ventana.