Las larvas se propagan con cajas de campo y en la ropa de 'collidors'

Los operarios que trabajan en cualquier tarea citrícola pueden ejercer de involuntarios transmisores de la nueva plaga de 'Cotonet' que está adueñándose de los campos valencianos de naranjos. La Conselleria de Agricultura recomienda que el personal laboral extreme los cuidados, pues al pasar de un campo a otro en un mismo día puede difundir sin querer el insecto, prendido en cualquier prenda de ropa.

Tal caso puede darse entre los podadores, que con frecuencia van de una parcela a otra tras terminar la faena en la anterior. Y también ocurre con mucha facilidad con los 'collidors'. En ambos casos se trata de operarios muy en contacto permanente con el arbolado, de modo que es sumamente fácil que algunos insectos se queden en la vestimenta y luego pasen a los árboles de otros huertos que todavía no tenían la plaga encima.

De igual modo puede difundirse este 'Cotonet' sudafricano con las cajas de recolección de naranjas y las herramientas de corte de la fruta o de poda. Por todo ello recomienda la conselleria que se adopten medidas preventivas, organizando las labores de manera que en una jornada no se pase de zonas afectadas a otras libres aún.