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Á. M.
Jueves, 17 de marzo 2016, 21:20
El empresario y expresidente del Valencia CF, Juan Bautista Soler Luján, ha puesto a nombre de un hermano y al de otras personas de confianza algunas de sus empresas, después de que la Justicia declarara culpable el concurso de acreedores de su empresa Urbanas de Levante y le inhabilitara para la administración de empresas por dos años. Aunque se ha presentado recurso y la sentencia está a la espera de revisión, lo cierto es el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) del lunes ya registraba el cambio de manos de tres de sus sociedades mercantiles.
Por el momento, la inmobiliaria Nou Mareny, que estaba siendo administrada solidariamente por los hermanos Juan Bautista y Javier Soler Luján, pasa a manos exclusivamente del segundo. A su vez, las sociedades Tarsol y Forjados de Levante, dejan de tener al empresario como administrador único y en su lugar aparece Eduardo Membrillas Gandul. Según figura en el Registro Mercantil, en ambos casos la propiedad sigue en manos de Juan Bautista Soler, aunque la inmobiliaria Tarsol incluyen como apoderados a la mujer e hijos del empresario.
El juez del juzgado de lo Mercantil número 2 de Valencia apreció a finales de enero irregularidades en la gestión de su empresa y un retraso injustificable a la hora de acogerse a la suspensión de pagos, lo que hizo que perdiera capacidad para satisfacer la mayor parte de las deudas con la Administración y sus proveedores. Como consecuencia de esta medida, se le condenó a una inhabilitación «para administrar los bienes ajenos durante un periodo de dos años, así como para representar o administrar a cualquier persona durante el mismo periodo».
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