

Secciones
Servicios
Destacamos
ELISABETH RODRÍGUEZ
Lunes, 24 de octubre 2016, 21:03
El presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), Cristóbal Aguado, siempre se ha caracterizado por su tono reivindicativo. Hace dos semanas, intervino en el Congreso Europeo de Agricultores, celebrado en Grecia, donde afeó a los diplomáticos comunitarios por el acuerdo suscrito con Sudáfrica, que amenaza a las campañas citrícolas españolas en un contexto especialmente delicado por los efectos del veto ruso. Y, en la misma línea, el que lleva ya 19 años al frente de la organización critica al Consell su estrategia de primar la producción ecológica sin, según afirma, atender las peticiones de incorporación de jóvenes al sector convencional.
¿Cómo valora la política del Consell en materia agraria?
La vertebración del terrirorio, la modernización y la apuesta por la incorporación de jóvenes, entre otras cosas, estaban en los programas electorales. No entiendo que todo eso haya caído en el olvido. De 900 solicitudes de jóvenes en 2016 para los planes de incorporación al campo, sólo se aprobaron 200 con el argumento de que no hay presupuesto. Y, sin embargo, los siete millones de euros que faltaban por asignar se los ha llevado en su totalidad la producción ecológica. Es decir, no se ha destinado ni siquiera una parte de ese dinero, cuando el envejecimiento es un problema muy grave del sector. Lo que se criticaba desde la oposición es lo que se come ahora.
¿Cuáles son los principales retos del sector?
Se estima que en unos años, haya dos mil millones de personas más en el planeta, lo que implica un gran reto para el sector, ya que no sólo debe ser sostenible, sino que debe producir la cantidad suficiente para alimentar con calidad a la población. Precisamente, la implicación de los jóvenes es fundamental, porque tienen mayor nivel cultural y mejor capacidad de adaptación e innovación para hacer frente a este tipo de cuestiones. Por ese motivo, es incomprensible que la Conselleria de Agricultura no vea los grandes retos de la agricultura del futuro y sólo piense en mirar atrás y no caminar hacia adelante.
Los desequilibrios en la cadena alimentaria son otros de los problemas más denunciados por las organizaciones agrarias.
El productor, el envasador y la distribución deben tener un margen de beneficio justo para que, finalmente, el precio que pague el consumidor sea justo también. Eso genera economía, empleo y una sociedad más avanzada. Esta idea es algo que muchos no entienden y están abusando de los otros eslabones. Por ello, pedíamos una ley de la cadena agroalimentaria, con carácter sancionador para garantizar que se paga unos salarios justos. No se trata de que gane la gran distribución, sino que cada eslabón de la cadena tenga una compensación justa.
¿Qué perspectivas manejan para la campaña de cítricos?
Las circunstancias climáticas, como la sequía, han propiciado que los cítricos tengan un calibre inferior al considerado óptimo, de manera que se destinará una parte a la industria o se quedará en el árbol. Creemos que la campaña irá a mejor, a medida que se dé paso al frío. Hasta ahora ha habido temperaturas excepcionalmente altas, algo que perjudica al consumo de cítricos, que en Europa se asocia al frío. Poco a poco, se estabilizará el precio y con ello, una parte del sector.
¿Qué peligros supone el acuerdo con Sudáfrica?
Los citricultores de toda Europa tenemos un contencioso con Sudáfrica porque desde hace años. Es un peligro potencial que puede acabar con la citrucultura europea por sus plagas. Hemos exigido medidas de control mayores, en vez de eso, la Unión Europea las ha flexibilizado. Lo que está claro es que el lobby sudafricano tiene un peso enorme. En el congreso europeo, en Atenas, recordé a las autoridades el acuerdo de Bratislava, donde se determinó que se harían informes sobre el impacto de las importaciones de otros países. ¿Dónde está ese acuerdo ahora?, pregunté.
Un convenio que agrava aún más el efecto del veto ruso...
Efectivamente, nos ponen a los pies de los caballos. Los mercados alternativos no nos bastan para compensar las pérdidas de lo que suponía el mercado ruso. Queremos reciprocidad entre países, que se pongan las mismas exigencias y ventajas para todos. Está claro que Europa está equivocada en la forma de negociar; debe de preocuparse en abrir mercados, no cerrarlos. Además, las autoridades europeas no han tomado medidas para estabilizar el mercado. Lo que ha hecho ha sido aprobar unas ayudas que resultan insuficientes.
¿Y el tratado comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos?
Creo que EEUU es una gran mercado para la Comunitat y para España, pero los acuerdos deben realizarse con reciprocidad. Tenemos que contar con las mismas garantías para ambas partes. Si el TTIP va a ser la imposición de EEUU a la UE, no nos conviene. Abrir el mercado del mundo no es malo, la cuestión es cómo se abre. También he de decir que me gustaría que hubiera más transparencia en las negociaciones para estudiar los impactos legislativos, productivos y laborales.
¿Estáis a favor de rescatar Intercitrus pese a su polémico funcionamiento en el pasado?
La interprofesional es un reto de todo el sector; desde AVA estamos a favor siempre que se haga con compromiso. La Generalitat podría brindar las instalaciones. Si todos nos pusiéramos manos a la obra, podría llevarse a cabo el año que viene, aunque de momento eso lo veo difícil.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.