Alberto Catalá, expresidente de la entidad tras el archivo: «Los hechos hablan por mí»

El expresidente de Feria Valencia, Alberto Catalá, ha optado por la discreción durante los años que ha durado la investigación y que ha cuestionado su labor al frente de entidad. Entre otros aspectos se le ha señalado como presunto responsable de actuaciones calificadas de corruptas. Sin embargo, los hechos que la Intervención General de la Generalitat remitió en 2014 a la Fiscalía Anticorrupción no se consideran constitutivos de delito y, en todo caso, serían asuntos para resolver en el ámbito administrativo.

El responsable de la institución durante 14 años ha recibido la noticia con alivio aunque es tajante a la hora de insistir en su silencio: «Los hechos hablan por mí». En empresario dejó la presidencia de Feria Valencia en octubre de 2013 por motivos personales y para dedicarse a su empresa por la delicada situación que atravesaba. De hecho, en mayo de 2014 la empresa familiar del sector textil Rafael Catalá SA se declaraba en concurso de acreedores, después de más de 240 años de historia.

Nueve meses más tarde saltaba la noticia de que la Fiscalía Anticorrupción investigaba los gastos de Catalá y de otros directivos, tras la remisión de un informe al respecto realizado por la Intervención de la Generalitat, dependiente de la Conselleria de Hacienda, entonces ocupada por el actual delegado del gobierno, Juan Carlos Moragues.

La medida se tomó a pesar de que Alberto Catalá y otros directivos ya habían sido investigados por un juzgado de Valencia por presunta apropiación indebida en el uso de su tarjeta Visa Oro de la Feria. Como ha ocurrido en este casa, la investigación, iniciada a raíz de la denuncia de un extrabajador del recinto, acabó siendo archivada.