Agricultura implementa un sistema de riego para olivos que ahorra el 20% del agua y mantiene la calidad del aceite

El ensayo, que se ha llevado a cabo en la Cooperativa de Viver, se enmarca en el proyecto europeo HandyWater, financiado por la convocatoria PRIMA 2020 y coordinado por el Centro para el Desarrollo de la Agricultura Sostenible (CDAS), en colaboración con el Servicio de Tecnología del Riego (STR), ambos del IVIA.

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La intención del departamento dirigido por Miguel Barrachina con este ensayo es la de «acercar tecnologías de riego avanzadas a los pequeños agricultores, para mejorar la eficiencia en el uso del agua y la rentabilidad de los cultivos», según ha explicado la propia Conselleria de Agricultura.

Aunque la solución del proceso ha salido a la luz ahora, el proyecto lleva labrándose dos años. Durante 2022 y 2023, el IVIA realizó comparaciones entre un sistema de riego por goteo superficial y otro por goteo subterráneo en una parcela piloto de olivar de la variedad autóctona Serrana, perteneciente a la Cooperativa de Viver.

Los resultados obtenidos en las campañas de 2022 y 2023 mostraron que con el sistema de riego subterráneo se consiguió reducir el consumo hídrico en un 20 % en comparación con el riego superficial. La reducción de la evaporación y el uso de sensores de humedad del suelo favorecieron el ahorro y mantuvieron tanto la producción como la calidad del producto.

El olivar es el segundo cultivo más importante de la Comunitat Valenciana en términos de superficie cultivada, con 93.741 hectáreas, por detrás de los cítricos. Este cultivo, caracterizado por una estructura propietaria reducida cuenta con aproximadamente 63.000 olivicultores, y resulta crucial para la fijación de la población rural en su entorno.