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AVA prueba suerte con mutaciones de mandarinos

El ensayo con variedades irradiadas busca novedades de interés

V. LLADRÓ

Domingo, 5 de junio 2016, 23:59

La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) se ha sumado a la moda mundial de buscar la obtención de posibles nuevas variedades de cítricos que aporten unas condiciones que las hagan de interés comercial.

En su finca experimental Sinyent de Polinyá del Xúquer, los técnicos de AVA han destinado una parcela para implantar cientos de plantones de cítricos en los que se han injertado múltiples mutaciones de varias mandarinas, obtenidas mediante el procedimiento de irradiación en bomba de cobalto. Este sistema suele provocar alteraciones genéticas de las que se derivan variaciones apreciables respecto a las variedades de las que se parte.

No obstante, estas variaciones suelen resultar en gran medida en aberraciones o defectos, por lo que se desacartan de inmediato. Lo más habitual es que muchas de las mutaciones den frutos enormes, diminutos o deformes, cosa que no interesa en absoluto; o son excesivamente agrios o se caen precozmente, o las ramas presentan exageradas espinas, etc. Una vez descartado lo que ya se ve enseguida que no conviene, sigue un largo proceso de años en los que se estudia pormenorizadamente la evolución de las pocas cosas seleccionadas por su aparente interés inicial.

La probabilidad de que surja algo que reúna caracteríasticas que lo conviertan en una 'estrella' es bastante reducida, pero la verdad es que hay que estar en ello y probar incesantemente por si se consigue. En realidad es lo que se está haciendo en centros de investigación y desarrollo de todo el mundo, y muchas de las variedades obtenidas llegan a España con la aureola de una calidad que luego puede ser dudosa y además previo pago de fuertes royalties. De ahí el interés de probar par obtener algo aquí. En el IVIA se desarrollan vastos planes pero hasta hoy no ha surgido una gran 'estrella' rutilante, y además está en tela de juicio su programa de híbridos triploides porque se basó en la 'Fortune', variedad hipersensible a la Alternaria. AVA, en cambio, ha optado por otros parentales de calidad y la irradiación. Y en caso de obtener algo de interés lo cedería a los citricultores con bajos royalties.

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