REDACCIÓN
Lunes, 13 de junio 2016, 00:18
La Unió de Llauradors ha recomendado a los citricultores afectados de las variedades Garbí y Safor «que piensen con cabeza y esperen» a ver el resultado de las conversaciones que esta formación mantiene con el IVIA, organismo que obtuvo y extendió dichas mandarinas, que se manchan y son poco comerciales.
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La Unió considera que los agricultores deben valorar la posibilidad de obtener compensaciones negociadas «antes de decidirse a litigar», ya que el pleito podría ser largo, costoso y de resultado incierto. No obstante asegura que, si la respuesta de la Administración continúa siendo insatisfactoria, no descarta «iniciar acciones judiciales contra todos los responsables de este desaguisado».
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