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Sergio Ferrer, CTO; Juan Peña, CEO; Alex Mengual, CIO; Diego Morell, desarrollador. LP

El algoritmo que vela por la salud del mar

La firma ha sido galardonada por su innovadora plataforma, que busca evitar tragedias como la del Prestige | La valenciana OrbitalEos desarrolla un sistema con satélites que detecta la contaminación en los océanos

ELÍSABETH RODRÍGUEZ

Sábado, 4 de abril 2020, 23:24

valenciA. De estar trabajando en Salvamento Marítimo a lanzarse a crear su propio sistema para salvar los océanos. Esa es la historia, de manera resumida, de la 'startup' valenciana OrbitalEos, que el pasado mes de febrero ganó el premio GO! ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) por crear una plataforma con un algoritmo propio de inteligencia artificial que, junto a tecnología satelital, detecta contaminación marina en todo el mundo.

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Aunque el proyecto tiene dos años y medio, la empresa fue fundada en junio de 2019 por Juan Peña, director general; Pablo Benjumeda, jefe de Operaciones; y Alejandro Mengual, responsable de tecnologías de la información. Posteriormente se sumaron Sergio Ferrer, responsable tecnológico, y Diego Morell, desarrollador. Ahora, la firma está en la aceleradora de Gobal Omnium.

«Pablo y yo trabajábamos en un avión de Salvamento Marítimo y una de sus principales funciones era detectar la contaminación en el mar -lo más habitual son las manchas de petróleo-, además del rescate de personas», explica Peña, que estuvo 12 años en este servicio, encargado de vigilar que los barcos cumplieran con la normativa medioambiental.

La empresa, que está en el programa de aceleración de Global Omnium, es pionera en su campo de actuación

«Todos los residuos del motor, que son oleosos, se guardan en un depósito que tienen los barcos. Es de obligatorio cumplimiento que el contenido de ese depósito lo recojan para ser procesado. El problema es que durante muchos años los barcos lo han ido tirando al mar», explica el empresario, que estudió Ciencias del Mar en la Universidad de Cádiz.

Hasta hace poco, la contaminación en el mar se detectaba mediante aviones con sensores que sobrevolaban los mares para identificar vertidos. Pero eso tiene múltiples limitaciones. «Tu cobertura geográfica está limitada por la zona sobre la que puedes volar. Esa reflexión coincidió con un momento en el que el sector espacial se empezó a abrir y empezaron a aparecer empresas que ponían satélites en órbita muchísimo más baratos de lo que costaban hasta ese momento», señala Peña. «Las agencias espaciales empezaron a democratizar los datos de los satélites para que fueran de libre acceso para cualquier persona», añade.

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Fue entonces cuando Peña y Benjumeda, que es ingeniero industrial y trabajó en Airbus, se decidieron a realizar un máster en la Universidad de Valencia, donde aunaron su experiencia profesional con sus inquietudes científicas. «Había que dar ese salto tecnológico», apostilla el cofundador de esta plataforma que combina imágenes de satélite con técnicas de inteligencia artificial y ciencia de datos.

«Los satélites son imparciales. Hacen una fotografía y esa información es muy difícil que se pueda manipular. Por otro lado, no descansan nunca, siempre están dando vueltas; tienen entre 7 y 15 años de vida útil», explica el dirigente, que resalta también cómo pueden trascender barreras físicas. «Con el avión, hay zonas que no podíamos sobrevolar pese a que veíamos que una mancha se extendía hasta otro dominio o país. Ahora podemos analizar todo el globo», agrega.

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Además, Peña resalta que «lo bueno» de los satélites es que son muy poco invasivos, no implican ni requieren la presencia física de nadie, son seguros y no hay que pagar por los datos que extraen. «El valor está en la interpretación de esos datos», añade el experto en ciencias del mar.

Tal y como cuenta Peña, el paso de dejar su trabajo para montar su propio proyecto «es toda una aventura» de la que no se arrepiente. «Nos apetecía apostar por ello. Esto entraña incertidumbre pero hasta el día de hoy no me arrepiento ni un sólo segundo. Es increíble la cantidad de cosas que aprendes», subraya.

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Por lo que respecta a la financiación, hasta ahora se han servido de los premios y las ayudas europeas. «Ahora mismo estamos en Go Hub, que tiene un programa de financiación», señala. No obstante, indica que prefieren priorizar su entrada al mercado antes que conseguir capital. «Es verdad que se nos acercan muchos fondos de inversión, pero no queremos perder el foco y estamos centrando el esfuerzo en conseguir clientes».

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