

Secciones
Servicios
Destacamos
A falta de dos meses para que el contador llegue a cero y que la delicada situación financiera que vive Feria Valencia le lleve a la quiebra y a un posterior concurso de acreedores, el Ayuntamiento de Valencia ha decidido mover ficha para tratar de desatascar el conflicto de intereses entre las instituciones. El consistorio encabezado por Joan Ribó ha planteado una cesión de los terreno de la entidad en manos del Ayuntamiento a la Generalitat en lugar de un intercambio de bienes.
La iniciativa fue enviada a las consellerias de Hacienda y Economía y parte de un informe realizado por los técnicos de la capital de la Comunitat. La misma se centra en evitar una pérdida patrimonial municipal que tanto se temía y apuesta por una cesión de los terrenos hasta el año 2051. Según el Ayuntamiento, el movimiento también permitiría solucionar el limbo legal que vive Feria Valencia y aclarar al fin su inexacta naturaleza, entre lo público y lo privado.
La propuesta se basa en una mutuación demanial, que es un concepto muy utilizado para el intercambio de bienes entre administraciones para que, por ejemplo, se pueda construir un colegio de titularidad autonómica en un suelo municipal. Además, incluye una cláusula de rescisión que obliga a que estos inmuebles siempre se dediquen a la actividad ferial ya que en el caso contrario volverían a manos del consistorio. De hecho, esta propuesta ya fue puesta encima de la mesa por parte de la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia ahora la recupera. El cambio más significativo es que el concedente de los mismos sería la administración autonómica, que ya tendría tras este paso todos los activos para incorporar Feria Valencia al sector público instrumental, refundarla como una empresa pública autonómica y poder cerrar la asunción de la deuda que lastra la institución ferial.
Vicent Soler, conseller de Hacienda, ya mostró la semana pasada su predisposición para alcanzar un acuerdo y se ha ratificado en su postura. Tanto la conselleria de Hacienda como la de Economía han agradecido una propuesta que supone desbloquear un debate enquistado y han asegurado que es una buena base para comenzar a negociar aunque consideraron necesario pulir algunos flecos. Desde la Generalitat se ha instado al Ayuntamiento de Valencia a poner fecha a una reunión para cerrar el acuerdo y han remarcado que este problema de Feria Valencia tiene su origen "en la mala gestión" de los gobiernos del PP.
La negociación debería concluir antes del 31 de marzo, fecha en la que Feria Valencia debe aprobar unas cuentas que, hoy por hoy, conllevan unas pérdidas de más de 90 millones. Un resultado que no es debido al negocio, que se ha resentido por la pandemia e implica pérdidas de dos millones, sino por la existencia de la cuenta acreedora en la que figuran los fondos aportados por la Generalitat y que, contablemente, se deben devolver pese a la imposibilidad material. Algo que admiten todos los actores.
La propuesta del Ayuntamiento de Valencia despertó dudas en el PP. La portavoz municipal, María José Catalá, indicó que, a priori, rechazan la iniciativa aunque reclamaron el informe para poder evaluar las opciones. "No permitiremos un quebranto patrimonial ni que el Ayuntamiento salga del futuro y del proyecto de Feria de Valencia para resolverla la papeleta a la Generalitat", ha sentenciado
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.